EL año futbolístico parece culminar para Amaranto Perea y con esto, su sueño de jugar el Mundial de Clubes se desvanece, pues la lesión que lo marginó del pasado Mundial de Brasil 2014 no evoluciona favorablemente y, al contrario, cada días se complica más.

A pesar de que la resonancia magnética a la que fue sometido la semana pasada no arrojara un resultado positivo, y la inflamación en la rodilla no cede, el zaguero colombiano mantiene viva la esperanza de participar el próximo 13 de diciembre en el debut de los celestes, en la justa internacional, aunque es consciente que su ritmo futbolístico no será el idóneo.

“La resonancia no lanzó el resultado que esperábamos. Teníamos el objetivo que el hueso estuviera totalmente desinflamado. No quedo descartado para el Mundial de Clubes. El problema no va a ser la recuperación, sino la falta de competencia, y eso lo decidirá el entrenador. Por mi parte agotaré todas las posibilidades para estar bien, pero no podemos hacer mucho en la parte competitiva, porque los tiempos no permiten hacer futbol, y solo algo en la parte aeróbica”, expresó el zaguero.

Asimismo, el cafetalero dejó en claro que falta poco para que la rodilla se desinflame por completo: “Lo que queda es mínimo, y eso nos permitirá avanzar en otro tipo de trabajo, pero la preocupación está más en la falta de ritmo”, mencionó Amaranto, quien además indicó ya tenía definido un trabajo especial en caso de que el hueso hubiera sanado: “Queríamos comenzar a trabajar en campo, preparamos la semana para trabajar doble turno y enfocarnos en la parte aeróbica, pero ya falta poco para que el hueso termine de desinflamar y no equivocarnos nuevamente”, concluyó. (TGT/Foto: Alejandro Villa)