Con la tecnología de Google Traductor

Mira

9, julio 2018 - 2:16

┃ Jorge Briones

nota-futm-inglaterra

Una nueva forma de concebir el fútbol, eso es lo que instauró Gareth Southgate con el seleccionado inglés.

El estratega británico aprovechó la nueva versión de la Premier League para darle un giro a la serie de fracasos que sufrió el “Equipo de la Rosa” en las últimas ediciones de las Copas del Mundo. Llevaban 28 años sin meterse a unas semifinales, primera barrera superada para el conjunto del ex referente del Middelsbrough.

Atrás ha quedado la época de los pelotazos en el fútbol inglés, ahora entienden que el juego se modernizó con la posesión como principio de todo.

También puedes leer: Rusia 2018 tendrá una final inédita

La temporada 2016-17 de la Premier marcó un parteaguas en el balompié de las islas. Antonio Conte instauró una línea de 5 que llevó a su Chelsea al campeonato y sobre todo, provocó que al menos 11 equipos terminaran ese curso copiando su sistema de juego.

Southgate aprovechó el contexto de sus jugadores y lo trasladó a su combinado, todos muy identificados con el 5-3-2 o 3-5-2 a la hora de atacar.

La segunda gran determinación vino con el fin de la era de Wayne Rooney en el seleccionado. Sin su capitán y último estandarte a nivel mundial, el estratega le dio el brazalete al delantero Harry Kane, quien lidera un grupo joven, pero muy talentoso que espera sacarse los fantasmas del pasado y que se encuentra a dos pasos de su segundo Mundial tras el conseguido como locales en 1966.

Para Rusia 2018, el Gareth prescindió de jugadores como el experimentado portero Joe Hart, y de Jack Wilshere y Adam Lallana, mediocampistas relacionados con la posesión del esférico.

La idea es atacar con transiciones rápidas y un bloque replegado, pero eso sí, con el sello de Guardiola en la salida de balón. De los tres centrales, dos (Kyle Walker y John Stones) juegan con el Manchester City de Pep, por lo que están identificados con la construcción desde su propio campo, una vez pasando la primera línea, todo es dinámico.

También puedes leer: ¡Cuatro de cuatro! América mantiene paso perfecto en pretemporada

El ser la tercera selección con el menor promedio de edad, con apenas 25.9 años, les juega a favor con los carrileros (Kieran Trippier y Ashley Young) y los interiores (Jesse Lingard y Dele Alli) moviéndose indistintamente por todo el frente de ataque.

La inteligencia de Kane, alejándose de los centrales, abre el hueco para las llegadas por sorpresa de Alli y Raheem Sterling, y aún así, mantienen como su punto fuerte la táctica fija. Siete de los 11 goles que lleva Inglaterra en la Copa del Mundo llegaron por esa vía. Ya sea en penal o córner, la amenaza es constante. Stones y Harry Maguirre, revelación del Leicester City, son indomables en el aire.

Con este escenario, la suerte ha jugado a su favor desde el sorteo mundialista. Quedó emparejado con dos de las peores selecciones de la justa (Túnez y Panamá), y ya clasificado jugó con suplentes ante Bélgica. Quedar segundos en el Grupo H les significó colocarse en la parte débil del cuadro, con Colombia en octavos y Suiza-Suecia en cuartos. Rivales a modo para volver a unas semifinales. Y así fue.

Ahora, a un paso de la final, los creadores del fútbol chocarán ante una Croacia con una idea totalmente opuesta, más pausada y con dos de los mejores mediocampistas del mundo como punto fuerte.