Por Omar Rodríguez

Imposible olvidar aquella imagen en la que se observa a Carlos Adrián Morales sentado en la banca del estadio BBVA,  evidenciando un rostro desencajado, con lágrimas y lamentando la derrota ante Monterrey ocurrida en el penúltimo partido del torneo Clausura 2018, mismo que representó el descenso de Lobos BUAP, equipo que le brindó la última oportunidad para demostrar su talento en el futbol profesional y que se benefició con cada segundo que tuvo en la cancha al michoacano.

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Dos meses después de ese amargo episodio, Carlos Adrián Morales pasó por un momento agridulce, pues este miércoles vía una carta difundida en sus redes sociales anunció su retiro como jugador profesional.

Un día antes, el mediocampista que fue el referente y hombre de experiencia en Lobos BUAP durante la primera campaña del equipo universitario en la Primera División, participó en el partido de homenaje a Damián Álvarez, esto a sabiendas de que horas después tocaría su turno de despedirse de una profesión a la que dedicó un par de décadas.

“El Eterno 28”, como se le conoce al mediocampista, recordó en esta carta a cada uno de los equipos a los que defendió y para ellos y sus respectivas aficiones brindó palabras de agradecimiento, tal y como lo hizo para una carrera que lo llevó a cumplir su sueño.

Así que con el punto final a aquella carta, Carlos Adrián Morales, que logró campeonatos y subcampeonatos en Primera División,  también dio conclusión a una profesión  que lo llevó a jugar con La Piedad, Monarcas Morelia, Pachuca, Tigres, Toluca, Estudiantes Tecos, Santos Laguna y Lobos BUAP.