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Mira

24, noviembre 2014 - 21:06

┃ María Vega

notas-toros-armillita

POR HORACIO SOTO CASTRO
FOTOS: ALEJANDRO VILLA

AUNQUE Fermín Espinosa de León Díaz esperaba salir a hombros, manifestó que está contento con la oreja que cortó en el toro de la confirmación de alternativa en la plaza México, pues con anterioridad tenía en la mente que “algo tendrá que pasar”, afortunadamente fue para bien.
“Esa tarde era muy importante para mí y para mi carrera -asentó Fermín-; era un reto fuerte pero supe afrontarlo dignamente. No redondeé la tarde como lo esperaba de salir a hombros por la Puerta del Encierro, por el percance que sufrió mi segundo toro al estrellarse en un burladero y partirse el cuerno izquierdo”.
Con el cuerno partido, el público, que deseaba ver a Fermín, ya no le tomó en cuenta lo que hacía y no había otra que abreviar y así lo hizo.
“Armillita IV”, ayer después del triunfo mantenía su actitud inmarcesible, pues en ningún momento dentro de la charla dejó ver que estaba contento, no hubo manifestaciones festivas.
Pero desde el despegue de cuadrillas se le vio tranquilo, relajado, como si caminara dentro de su casa. Como que le era familiar la plaza.
“Las presiones y los miedos los tenía por dentro, pero había que vencerlos; hacer que pasara algo bueno y poder disfrutar la tarde y lo que hacía”.
Había expectación entre el público que estaba esperando verlo torear y demostrar su capacidad y él porque iba a confirmar la alternativa.
“Afortunadamente el toro (de nombre Pata Negra) tuvo nobleza y clase y lo pude torear a gusto. El público me estaba esperando que hiciera algo y lo hice por las condiciones del toro, pero no pude redondear, como era mi deseo. La gente lo vio bien e hice una faena bien estructurada, de menos a más con muletazos templados y con largueza, además de algunos buenos detalles toreros”.
Así calificó su labor Fermín a pregunta expresa y lamentó que su segundo se haya inutilizado y no había por qué regalar un toro, ya que había triunfado en su primero y dejó un regusto para volverlo a ver.
Respecto a la ceremonia de la confirmación, fue un bonito detalle del maestro Miguel Ángel Perera al invitar a su papá a que fuera él quien le otorgara la muleta y el estoque en un acto inusual pero que le cayó bien a los asistentes, además porque estaba cumpliendo 40 años de haber confirmado su doctorado.
Es obvio y así lo reconoció Fermín que está empezando en cero y hay que aprender mucho y desde siempre ha estado en el campo preparándose, afinando su toreo y corrigiendo errores. Su carrera es corta pero vertiginosa y apenas logró unos 20 festejos entre novilladas y corridas mixtas, que le han dado experiencia y “he salido bien del compromiso”.
Respecto a su futuro, dijo que no hay nada seguro, de momento no tiene nada firmado pero desea que lo primero sea consolidarse en México para después pensar en España. Y de confirmar en Madrid, tendrá que ser muy posterior.
Espectáculos Taurinos de México lo programará en todas las plazas que controla, menos en el Nuevo Progreso de Guadalajara, pero en las demás sí toreará. Como es León, Monterrey, Aguascalientes, en fin, en las que maneja.
El empresario Rafael Herrerías está contento con el desempeño de Fermín y lo programará en alguna corrida importante en la segunda parte de la temporada.
Esos son los planes que hay, pero Fermín finalizó diciendo que “torearé donde me contraten”; mientras, seguirá preparándose.

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