CRÓNICA

Con lo justo, Necaxa se impuso con un hombre menos a Lobos. Los rayos apenas tuvieron energía para doblegar a una manada que salió sin miedo a cazar; sin embargo, resultaron electrocutados por un chispazo de Dieter Villalpando, 1-0 final.

Los hidrocálidos quedaron en desventaja por la expulsión a Gallegos y eso no lo supo aprovechar el cuadro de Palencia. El lobo no pudo morder a un conjunto local que mostró buena capacidad de escape.

EL JUEGO

Necaxa quiso electrocutar a Lobos. Los dirigidos por Leaño salieron con todo y buscaron la energía necesaria para inquietar a Toño Rodríguez, quien por momentos fue clave para evitar la caída de la guarida licántropa.

Los hidrocálidos se mostraron con ganas. Fue Dávila quien más ansioso estuvo en el ataque; sin embargo, no concretaba las jugadas de buena forma. Los dos Fernández buscaron ayudarle a crear peligro, aunque tampoco tuvieron mucha suerte. La manada aguanto los rayos que caían a su puerta.

Palencia dio indicaciones desde la banca y por las bandas buscaron comprometer la causa local. Atacaron unidos y bajo ese principio quisieron meter en problemas a Hugo González. El arquero mexicano tuvo que recurrir a varios destellos para evitar los goles. Los licántropos enseñaron los dientes, se hicieron del control del esférico y no cedieron ni un momento en la tenencia de la pelota.

Chirinos, Rabello, Abraham y Kazim quisieron dar la sorpresa. Sus ganas nunca disminuyeron y no dejaron de correr pese al sol que pegaba de manera fuerte en la cancha del estadio Victoria.

Los Rayos se quedaron en desventaja cuando Gallegos le dio una plancha a Olascoaga. El zaguero se tuvo que ir a bañar de manera pronta. Situación que provecharon los visitantes para buscar crear daño. Alguna mordida que fuera letal.

Sin muchas acciones de peligro, el central mandó a todos a descansar.

Para el complemento, ambos técnicos empezaron a cambiar la estrategia. Dieron indicaciones desde la banca para poder romper un juego que se trabó en medio campo, que no ofreció mucho espectáculo al público que quería que las fuentes se prendieran y cantar un gol.

Pese a tener 10 hombres, Necaxa se acordó de su buen futbol. Aquél que le dio frutos ante América y que puso a Pumas en aprietos por buena parte del partido. Leaño confió en sus pupilos quienes buscaron por todos lados humillar a un conjunto que, con el paso de los minutos, empezó a darles ventaja en el terreno de juego.

La manada no quiso darse por vencida y le puso empeño en la recuperación del balón. Querían cansar a unos rayos que iban y venían de sur a norte. Otra vez tuvo que aparecer Hugo en la portería local. Varios ataques de lobos se quedaron en sus guantes o estuvieron a punto de causar efecto sino era por la falta de precisión en el último pase o la contundencia al momento de definir. Aullaban mucho, pero no lograban morder.

Al final, con las fieras domadas por el clima, Villalpando aprovechó un contragolpe para sentenciar el marcador. De pierna derecha impactó al poste más alejado de Toño y fue el único chispazo que perforó la meta visitante. ¡Gol de Necaxa! Las fuentes se prendieron y los pocos aficionados apenas celebraron, pues muchos ya desalojaban el estadio. Necaxa tuvo un rayo de luz y lo aprovechó. Lobos parece que se le acaba el colmillo en los minutos finales de los partidos.

GOLES

ACCIONES