CRÓNICA

.- Monterrey sufrió de más para hacerse con el triunfo de 2-1 sobre Querétaro, que salió a jugarse la vida en el terreno de juego, sin embargo, el espolonazo de Edson Puch no fue suficiente, y los pupilos de Diego Alonso remontaron con dianas de Nicolás Sánchez y Dorlan Pabón.

La primera jugada de verdadero peligro fue para los Rayados. Rodolfo Pizarro partió del centro hacia afuera, se quitó de encima al defensor queretano y sacó un tiro que se murió en las manos de Tiago Volpi ante la mirada de sus compañeros que ya se relamían los bigotes.

El ritmo de juego no se detuvo en ningún momento. Fue entonces que los Gallos aprovecharon para dar el primer espolonazo. Edson Puch entró al área rival, en la pelea, Nico Sánchez lo recargó con el brazo, el chileno cayó, y se sancionó la pena máxima.

Edson fue el propio encargado de cambiar la pena máxima por gol. Lo remató fuerte a la izquierda para engañar a Barovero.

La reacción rayada no se hizo esperar, incluso les anularon un par de dianas por fuera de lugar, pero eso solamente era el presagio de lo que estaba a punto de suceder. Tiro libre cobrado por Urretavizcaya, Nicolás Sánchez peinó la redonda desviando la trayectoria hacia la red.

La polémica llegó al encuentro. Hiram Mier dio un fuerte pisotón a Avilés Hurtado cuando el colombiano esperaba escaparse a velocidad, sin embargo, la acción fue fuera del área, y el silbante sancionó penalti. La justicia divina se hizo presente, Nico Sánchez la reventó en el poste.

La segunda parte comenzó con las revoluciones arriba, sin embargo, poco a poco, fueron los Rayados los que se apropiaron del control de la redonda. Y esto se reflejó cuando a instantes del final, cayó la jugada grande para los Rayados. Rodolfo Pizarro inició a velocidad por el centro del campo, soltó a la pradera derecha para Dorlan, que centró para que Avilés Hurtado cerrara la pinza y pusiera cifras definitivas en el cotejo.

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