A poco más de un año de la implementación de la Liga femenil en México hay muchas cosas por destacar. Además del apoyo, la proyección, la apertura y el semillero que se ha convertido para las selecciones nacionales, para las jugadoras de los equipos mexicanos ha sido una oportunidad de crecer como profesionales.

Así ha sido para Hireri Velázquez, mediocampista del equipo femenil de Pumas, quien hizo un balance de lo logrado en el primer año del torneo rosa.

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9“Es muy importante, sólo era cuestión de ponerse a buscar. Ahora cuando vienen a hacer visorías aquí hay montón de chavas que te preguntas de dónde salieron si hace un año no había tantas, había que andar buscando y preguntando quién quería. También el impacto que está logrando con niñas súper chiquitas. La motivación que ha causado se ve en niñas que quieren jugar en un futuro y me parece increíble. Si esto se ha logrado en un año imagínate en dos, tres o cuatro, que esto se hará más grande”, contó Hireri en charla con el ESTO.

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La joven de 23 años jugaba para el representativo de la UNAM y en un partido de preparación que tuvieron contra las chicas que ya estaban en visoría recibió la invitación para hacer una prueba. “Al principio era complicado, todas veníamos de jugar en lugares diferentes, con caracteres diferentes, fue irnos acoplando a la manera de jugar de todas”, recordó.

El partido inaugural significó su debut. Ése, el Pachuca vs. Pumas de la Jornada uno del Apertura 2017, edición que curiosamente se repetirá este lunes, lo recuerda como si hubiera sido ayer. “Me tocó entrar de cambio, pero recorrer el túnel, la vibra, estar en el vestidor de un primer equipo, no hay manera de ponértelo en palabras. La afición, había bastante para ser un partido de la femenil. Entré 20 minutos, pero aunque hubiera jugado cinco lo hubiera disfrutado igual”, recordó la canterana universitaria.

Hoy le toca estar del otro lado y a pesar de que aún no se acostumbra a repartir autógrafos o a que le pidan fotos, disfruta del momento. “Te motiva a pararte por muy cansado que estés. Te motiva a seguir siendo mejor para que estas niñas también tengan la oportunidad y  puedan sentir lo que nosotros sentimos cuando pisamos a un estadio. Son sentimientos que te puedo decir que hace un año no creí que fueran a pasar”, dijo con cierta melancolía.

Con dos carreras en progreso, la futbolística y la académica, Hireri destacó la importancia de prepararse profesionalmente. En este caso, el conjunto universitario les da el apoyo para estudiar o trabajar. Tratan de acomodar los entrenamientos a sus horarios de clases; además de que cuando tienen exámenes se les dan las facilidades para que los presenten.

“Es importantísimo. Creo que el que tengamos una carrera más allá del futbol siempre nos va a hacer mejores jugadoras y personas. Poder hablar de otro tema que no sólo sea futbol, creo que el complemento de un título con una carrera profesional de futbol te abre las puertas al doble”, afirmó.