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Mira

26, noviembre 2014 - 10:00

┃ Manuel Gómez

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A PESAR de la reciente derrota frente al Atlas y de haber terminado mal el certamen, el presidente del América, Ricardo Peláez, consideró que el equipo está sólido para encarar la Liguilla y levantar el título.
“Este América está bien, está fuerte, sólido, como también somos conscientes de lo que el pasado domingo nos sucedió. Hemos realizado un autoanálisis y todos nos comprometimos a empezar la Liguilla de la mejor manera, porque para ganar un título hay que arrancar con el pie derecho”, dijo el dirigente amarillo.
“El haber calificado con anticipación, inconscientemente nos hizo tener altibajos en la parte final del torneo, pero veo al equipo muy comprometido y ha entrenado al ciento por ciento. Eso nos da confianza para decir que para esta Liguilla llegaremos muy bien”, advirtió sin miramientos.
Sin embargo, “por supuesto que iremos paso a paso, partido a partido”, porque definitivamente “enfrentaremos no sólo a un rival complicado, sino un clásico, por eso la expectación es grande, es alta, y eso nos motiva”.
Jugar contra Pumas es un clásico, rival que ande como ande suele ser peligroso. América lo sabe. En la fecha 7 el cuadro felino se impuso a domicilio. “Al tratarse de un clásico es algo extra, aparte es un partido de Liguilla que tiene muchos ingredientes que lo hacen diferente, pero lo enfrentaremos con muchísima responsabilidad, con la conciencia de ir paso a paso y cumplir nuestros objetivos”.
Peláez remarcó: “Para ser semifinalista se requiere mucha concentración, orden, intensidad y ganar el juego, aunque nada es fácil, siempre hay que esforzarse e ilusionarse, comprometidos, solidarios en el esfuerzo. Estamos bien para tratar de refrendar lo que durante todo el torneo hicimos, de estar en el primer lugar”.

MALDICIONES
La maldición del superlíder no es considerada por el dirigente amarillo.
“Esa palabra aquí no existe. Nosotros tenemos pensamientos positivos, no negativos. Siempre pensamos en metas altas, en objetivos claros, contundentes y positivos. Aquí las estadísticas y maldiciones las dejamos pasar y nos quedamos con la alegría, la humildad del día a día”, observó.

OBLIGACIÓN GANAR
Convertido en persona de pantalón largo, Ricardo Peláez está presente en los entrenamientos del equipo, y platica con todo mundo.
“Para ser jugador del América los objetivos siempre son fuertes, la exigencia en todos sentidos es permanente, y eso lo saben los jugadores, el cuerpo técnico, nosotros, los directivos, y esté quien esté los objetivos no cambian, y eso es importante, que los estemos recordando día a día”, remató.