METEPEC.- El rugir de los tambores anunciaba que el inicio de la batalla estaba próximo.

Las llamas del infierno se avivaron con los alaridos de medio centenar de seguidores que estuvieron presentes en el entrenamiento del Diablo.

¡Toluca, te quiero ver campeón! Fue el himno que motivó a los choriceros, que en cada jugada, disparo y atajada se entregaron al máximo para arrancar los aplausos de los presentes, quienes aseguraban: “Vamos a pasar a semifinales”, para continuar con los cánticos.

Al finalizar la práctica algunos jugadores se acercaron hasta la malla. El capitán escarlata, Paulo Da Silva, estrechó la mano de los más cercanos: “Muchas gracias por estar aquí, no los defraudaremos”, señaló. El “Cone” Brizuela posó para las cámaras de sus seguidoras, a quienes les arrebató los suspiros.

Así como unos fueron apapachados, otros fueron severamente increpados. Lucas Lobos fue exigido por un pequeño grupo que le demandó: ¡Pon hue..! Ante esto, Lobos abandonó la cancha con la mirada clavada en el suelo. El alboroto comenzó en el momento en que el Diablo Mayor se acercó. Sí, José Saturnino Cardozo, sonriente y muy amable, se tomó el tiempo de atender a todos los presentes, a quienes les obsequió fotos del recuerdo y repartió un sinfín de autógrafos.