RECIFE.- Si bien se trató del duelo entre italianos y ticos, varios fueron los brasileños y mexicanos que se dieron cita al encuentro en la Arena Pernambuco, por lo que existió variedad en las tribunas, mismas que alentaron únicamente a los centroamericanos debido al apoyo a las naciones de “éste lado del charco”.

El duelo correspondió a los reyes de las pastas y pizzas –italianos- y a los amantes del gallopinto -costarricenses-, por lo que sus gritos resonaron con más fuerza en la Arena que se pintó de multicolores entre verde, amarillo, rojo, azul y en sí, un arcoíris.

Eso sí, el tan famoso grito mexicano del “¡Sí se puede!”, ahora es nuevamente escuchado por los ticos, como en aquella vez del 2012 en el estadio Nacional de San José cuando México ganó en el cuadrangular previo al hexagonal final de la Concacaf. Así que la imitación no les costó y menos pagaron derechos de autor, sin embargo, se les perdona porque son la “Pura Vida” y pueblo hermano de los mexicanos.

Así que con el “Sí se puede” en combinación del “ole, le, ole, ticos, ticos…”, calló los pocos cánticos italianos, quienes evidentemente padecieron la temperatura con tanta humedad y calor, misma que no cambiará para el duelo del 2e de junio entre México y Croacia, así que el calorcito espera.

Ya en la cancha el espectáculo se cocinó por aparte entre Balotelli, Pirlo, Navas, Campbell o Ruíz, quienes desde el minuto uno fueron a la propuesta, fueron en busca del pase a octavos.