ANTONIO Mohamed tiene ante sí el reto más importante de su historia como técnico del América. Todo después de haber regalado buena parte del partido de ida de los cuartos de final ante unos Pumas que han sorprendido, con una actitud distinta a la del inicio de campaña y un mayor orden que les ha dado los resultados necesarios como para estar en esta instancia.

Será, como sucede en este tipo de series, un duelo de alto riesgo debido a los antecedentes entre estos equipos, su afición y todo lo que rodea a esta rivalidad que se hizo más fuerte precisamente en las finales.

El estratega de las Águilas fue duramente criticado por la alineación con la que enfrentó el partido en Ciudad Universitaria y los jugadores por la actitud que mostraron sobre el terreno de juego. Fue una noche mala para las Águilas, que sumaron un partido más sin conseguir la victoria y junto con el Monterrey, el único equipo que no marcó en las idas de los cuartos de final. Con el resultado del miércoles, sumaron cinco partidos sin conocer la derrota.

Se espera que regrese Rubens Sambueza al once azulcrema después de un par de partidos de inactividad debido a una lesión muscular. Esta ausencia hizo cambiar el parado de las Águilas para el primer duelo de la serie contra los universitarios, lo que no gustó a muchos de los seguidores, mucho menos después del marcador final.

Para este partido se esperan tres modificaciones de parte de las Águilas: Miguel Layún regresará como volante de la derecha y Osmar Mares a la lateral izquierda. Además, Daniel Guerrero y Michael Arroyo salen de la alineación para el ingreso de Sambueza y Luis Gabriel Rey.

“No estamos tranquilos por ahora, nos vamos a jugar todo”, comentó Moisés Muñoz un día después del primer partido en el que salieron lastimados en el orgullo y en el marcador, ya que la ventaja que ahora tienen los universitarios parece un arma de doble filo para los azulcremas, que cuidarán no recibir gol, lo que les obligaría a hacer tres o más.

Por su parte, los universitarios solamente tendrán la baja del arquero Alejandro Palacios, quien ya no estaría para lo que resta de la Liguilla por una luxación del hombro. Su lugar, como en el juego de ida, será ocupado por Alfredo Saldívar.

“Llegamos mejor que el América”, dijo Martín Romagnoli, confiado por el trabajo que han hecho a lo largo de los últimos partidos, sobre todo en los de la recta final, en los que mejoraron considerablemente. La llegada de Memo Vázquez dio vida al cuadro felino, que recuperó la confianza y hasta el gol, sobre todo en la figura de Eduardo Herrera, ahora con nueve tantos, y de Ismael Sosa, quien es el motor de la ofensiva puma.

En cuanto a la seguridad, se ha anunciado el trabajo de dos mil efectivos dentro del inmueble además de los de la Secretaría de Seguridad Pública para hacer un total de casi seis mil elementos para guardar el orden en un partido que siempre ha sido difícil por todo lo que rodea a estos dos equipos.

Vaya reto para Mohamed, quien tiene cosas por remediar y que además no pudo ganar un solo partido de los llamados clásicos en todo el Apertura 2014: perdió en el Azteca contra Pumas, perdió contra Cruz Azul de visitante y cayó ante Chivas en casa. Estos antecedentes no ilusionan mucho a su gente, aunque intentan no pensar en ello.

Se reportan listos América y Pumas para la vuelta de unos cuartos de final que han despertado bastante interés debido a la historia que hay entre los contendientes. No se quieren en la cancha y ahora los Pumas llevan la ventaja al estadio Azteca, en donde se vivirán 90 minutos de mucha tensión por lo que está en juego para unos y otros. El silbante central será Roberto García Orozco.