Las circunstancias del partido obligaron a Cruz Azul a nadar contra corriente, sin embargo, en un acto de autocrítica, Pedro Caixinha aceptó que su equipo se tardó en encontrar equilibrio en el terreno de juego.

“El partido era difícil con un hombre menos, tardamos en equilibrar el equipo, no queríamos pensar que estábamos abajo en el marcador. Eso es algo que nos ha dejado contentos, el sacrificio, el entendimiento de lo que queríamos, seguir buscando una victoria. No sé cómo estaba el estadio, pero había una gran afición detrás de nosotros y ellos nos han reconocido el esfuerzo, hay que voltear la página y pensar en el partido del martes” compartió el portugués.

Aseguró que los Tuzos son el rival que más retos le representó a la Máquina hasta este momento.

“Era el partido donde teníamos más retos y hay un denominador común, los partifos wue no ganamos de visita, el equipo no ha entrafo a decir presente y eso nos costó, algo que nos dejó muy satisfechos es la capacidad de reacción, fue una buena reacción, hay que seguir pensando en eso”, declaró y enlistó loa desafíos. “Era uno de los retos, ganar de visita, poder conectar dos victorias consecutivas, iniciar un nuevo ciclo de victorias, lograr 26 puntos, 48 en el total y otro de carácter interno que no te puedo decir”.

A pesar de que Montoya y Rentería no han rendido como Caixinha quisiera, los apoya a muerte.

“No, siempre defiendo a mis jugadores en todas las circunstancias, si les doy la oportunidad es porque lo han ganado en el entrenamiento. El partido fue algo distinto, tienes que hacer cambios, Montoya fue el sacrificsfo y no ha tenido tanta oportunidad en el rumbo del partido para hacer bien las cosas”, expresó.

Descartó que las expulsiones ante los Tuzos fueran por frustración.

“Yo le llamo actitud competitiva, se convirtio en un equipo que mete, que se entrega, sí tenemos muchas rojas, pero son situaciones del partido, no fue una situación de mala leche”, concluyó.