POR: Rubén Beristián

Todo fue un caos en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. La llegada del portugués Stephen Eustáquio a Cruz Azul causó mucha expectativa. Entre empujones y un gran tumulto, el último refuerzo de La Máquina hizo su aparición en suelo azteca.

A pesar de tener acercamientos con grandes clubes del Viejo Continente, el mediocampista se decidió por México. El luso tiene claro a donde llega y qué escudo representará en el balompié de nuestro país de ahora en adelante. Así mismo reveló que un factor importante para su llegada es que un compatriota e iniciador en su carrera esté en el banquillo celeste. Pedro Caixinha lo pidió y su deseo ya se cumplió. 

“Es un equipo muy grande de México, muy grande. Estoy muy contento de estar aquí. Caixinha es muy importante”, expresó con una sonrisa al ver tantas cámaras y micrófonos a su alrededor.

En su primera aventura fuera de su país, Eustáquio no le teme a uno de los reto más importantes en su corta carrera. Él se dijo feliz por su arribo y tiene la firme convicción de dejar huella en la institución celeste.

“Vengo motivado, con fuerza mental y quiero mucho ser el mejor. Muy contento de llegar. Es una Liga muy grande. Cruz Azul es un gran club de México”, remató.

El jugador hará los exámenes médicos en La Noria, para después firmar contrato y ser presentado como nueva incorporación azul para el Clausura 2019.