POR FERNANDO SCHWARTZ

DESPUÉS de su gran campaña con Coras Tepic, donde fue subcampeón, Joel Tiburón Sánchez dio un paso al costado de la dirección técnica y nos explica el porqué de su determinación: “Me voy de lo más feliz. Muy agradecido con la gente que me dio la oportunidad de dirigir un equipo de nivel. Agradecido con José Luis Higuera, con Víctor Arana, que me dieron apoyo y respaldo. En lo deportivo hablo. Respetuosos y cumplieron siempre lo administrativo”.
De los jugadores: “Me voy orgulloso del grupo, que entregó siempre todo. Con la frente en alto de haber dirigido al equipo de Coras Tepic, agradecido infinitamente con la gente que nos apoyó en forma impresionante. Desgraciadamente no pudimos continuar por organización en el tema deportivo. De ahí en fuera sin queja y reconocimiento a la gente”.

APRENDÍ Y CRECÍ COMO PERSONA, COMO PROFESIONAL
Decisión: “La tomé el domingo. Me senté con los señores a darles plan de orden, armado del equipo, planificación de descanso y pretemporada. Se lo habíamos avisado a los jugadores. Planificamos con qué jugadores reforzar y las diferencias con el director deportivo (González China) fueron los que orillaron a esta decisión. Es respetable la decisión tomada. Mi agradecimiento total”.
Lo que saca de aprendizaje: “Me sorprendió gratamente encontrarme jugadores muy capaces en todos los sentidos, profesionales, con sed de triunfo, ganas de trabajar y me sorprendió honestamente lo mío. Tenía una expectativa y reconozco que me superó. Los chavos, los jugadores me aligeraron todo. Me voy mejor de como llegué de persona y profesional. Mucha ilusión en la profesión de DT, agradecido y con ganas de seguir en esto”.
“Tibu” siempre toma decisiones como lo hizo de jugador y habla de su renuncia al timón: “Es lo más sano y correcto. De hecho, con los dueños había tenido acercamientos para manifestarles mi inconformidad con las decisiones del director deportivo. Desde la fecha uno, después en la tres tuvimos otra charla donde reiteré mi inconformidad. Llegaron dos chavos extranjeros que solicité en la uno y llegaron hasta la fecha ocho. Era ya insostenible. Ya después en Liguilla no era correcto ni sano inquietar en mi molestia. Después de la final en el tema de planificación fue el momento justo para mostrar mi inconformidad con el director deportivo. Se tomó la decisión. Fue cordial. Nos dimos abrazo y a lo que sigue. Está ilusionado: “Quiero seguir. Debo estar listo por si se presenta. El futbol es bonito, pero muy saturado. No hay muchas oportunidades. Ya veremos. A aprender de estas lecciones de vida que da el futbol y a lo que sigue”.