Aguascalientes. – Morelia visitó un estadio que se le da bien y estuvo cerca de la victoria. De no ser por Hugo González, fácilmente los Monarcas habrían sacado los tres puntos del estadio Victoria. El portero brilló como rayo y mantuvo su meta imbatida. Necaxa no ha perdido y se mantiene en los primeros puestos. 0-0 final, gracias a un hombre que electrocutó las esperanzas de los michoacanos.

EL JUEGO

Con la convicción de mantener el invicto en el torneo, los hidrocálidos iniciaron el cotejo con mayor intensidad. El estratega Guillermo Vázquez no se guardó nada y mandó de inicio a Martín Barragán, Brian Fernández y Ángel Sepúlveda en busca de la anotación. Pero no inquietaron en ningún momento al arquero Sebastián Sosa. El uruguayo se mantuvo tranquilo y sin preocupaciones.

Del otro lado, Hugo González sí tuvo trabajo y estuvo cerca de ser vencido. El mal tino del peruano Edison Flores lo salvó, además de la tardía reacción de Miguel Sansores. El delantero michoacano estuvo cerca de perforar la red, sin embargo, no logró conectar de forma adecuada y su disparo sólo le sacó pintura al poste.

El encuentro se tornó soso y sin aproximaciones de real peligro. Un atajadón de Sosa levantó a los presentes en el recinto de Aguascalientes, aunque al final fue anulado por fuera de lugar. No había emociones.

El panorama se complicó para los rojiamarillos. El motor de los locales y que además festejaba 100 encuentros con Morelia, tuvo que salir de cambio por una lesión. Rodrigo Millar no creyó que, en un juego tan emblemático para él, terminaría de esa forma lamentable.

Con la baja sensible del chileno, el estratega Roberto Hernández no lo pensó y mandó otro hombre al ataque. Ahí apareció la juventud de Carlos Fierro para refrescar un poco más. Pero un jugador tan valioso como el “Chino” terminó por pesar. Monarcas dejó grandes espacios, y los Rayos aprovecharon, al menos en la posesión del esférico. Barragán lo intentó de chilena, Fernández con un tiro de larga distancia, pero la puntería falló. Así llegó el descanso.

Los rojiblancos quisieron dar el golpe que matara las aspiraciones de los de Morelia. Por ello, Vázquez dio ingreso al delantero que le ha respondido en los últimos cotejos. Eduardo Herrera entró como el revulsivo necesario para cambiar la dinámica en el estadio Victoria.

Los visitantes lo intentaron también. La forma más peligrosa en la que lograron inquietar a González fue a balón parado. Sebastián Vegas fue el más incisivo al rematar de cabeza en dos ocasiones. El cancerbero hidrocálido se convirtió en el héroe al atajar todos los embates de los michoacanos.

Las emociones llegaron por fin. El “Poteyo” se encontró con el balón por los aires y dibujó una estupenda chilena. Sosa ya estaba vencido y sólo la visualizó. En el trayecto de la redonda se encontró con el metal.

No hubo más y no cayó ningún chispazo. Necaxa mantiene su invicto en el certamen, mientras que Morelia sigue sin perder en Aguascalientes desde hace tres años.

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