POR HÉCTOR REYES

El campeón de los Juegos Olímpicos de la Juventud, el clavadista Randal Willars Valdez, quien no calificó a la Serie Mundial del presente año debido a una cirugía de muñeca y ante el conflicto que se generó por la forma que se repartieron las plazas el pasado 14 de febrero, lamentó que se provoquen este tipo de situaciones.

“Todos quieren un lugar para Tokio 2020, todos están peleando tener las mejores oportunidades, pero al final son decisiones que se dan a nivel federativo. Yo considero que no nos deberíamos de meter tanto, no es nuestra chamba, nuestra chamba solo es entrenar y demostrar en la alberca la calidad y dar la cara por nosotros, por el equipo y por México”.

Randal Willars, quien ha tenido los mejores elogios de los especialistas chinos, después de su participación en la Serie Mundial del año pasado, ya había escuchado este tipo de problemáticas, pero ahora que ya compite en primera fuerza es nuevo para él, no le había tocado vivirlo en carne propia.

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“Preferiría esa energía, ese tiempo gastarlo más en el entrenamiento y realmente en lo que tengo que hacer”, declaró el deportista de 18 años que hubiera deseado asistir en clavados sincronizados desde la plataforma con el regiomontano Andrés Villarreal para probar sus avances y dijo que al final no se dio la oportunidad, pero tampoco, añadió, no pasa nada.

Randall tendrá las competencias de Grand Prix en la prueba individual y sincronizados con Diego Balleza, para foguearse como parte de la preparación para el Campeonato Nacional y selectivo de Guanajuato, a finales de mayo, que es la competencia importante para asistir a los Juegos Panamericanos de Lima 2019 y Campeonato Mundial de Natación en Corea del Sur.

“No es la pareja para el selectivo, por eso era la idea si tal vez se presentaba la oportunidad de ir a una Serie Mundial con Andrés que él va a ser mi pareja y para probarme, pero a pesar de que no se dio, vamos a ver en qué situación nos podríamos probar”, reiteró el novel exponente de los clavados de México.

Dijo que a fin de cuentas, las pruebas sincronizadas o mixtas son plazas para el país y ahí la Federación tiene la facultad de decidir quiénes integran las parejas: “Lo justo era que se dejaran los lugares a quiénes se lo habían ganado en la Copa del Mundo y en el caso de que se tomara la decisión de repartir plazas, no fue para todos”, enfatizó el discípulo de la profesora Ma Jin.