Con la tecnología de Google Traductor

Mira

13, diciembre 2014 - 12:43

┃ María Vega

cro-futi-barcelona-getafe

El Barcelona dejó dos inesperados puntos en el camino al empatar sin goles ante el Getafe y permitió que el Real Madrid se escapara en la lucha por el título de la Liga española.
El equipo conducido por Luis Enrique le puso fin a una racha de cuatro triunfos al hilo en liga y tropezó ante un rival muy ordenado en defensa y que nunca perdió los estribos.
El Getafe volvió a complicar al Barcelona como lo hizo la temporada pasada, cuando le robó unos puntos en el Camp Nou que fueron determinante en la pérdida del título de los azulgranas.
El Barcelona quedó ahora a cuatro puntos del líder Real Madrid, que el viernes goleó por 4-1 al Almería y mañana viajará a Marruecos para la disputa del Mundial de Clubes.
El conjunto azulgrana no pudo encontrar los caminos en un partido condimentado por una lluvia incesante, pagó caro la falta de velocidad en las transiciones y hasta tuvo mala suerte en algunas ocasiones de peligro esporádicas.
El Getafe, por su lado, acumula cinco partidos sin victorias en la liga aunque el empate de hoy fue valorado como un triunfo, dada la magnitud del rival.
El campo de juego en estado irregular y la lluvia persistente a lo largo de todo el encuentro complicó las búsquedas de asociaciones por lo bajo del equipo visitante.
El Barcelona, que salió al campo con Pedro en lugar del lesionado Neymar, tardó demasiado en poder aplicarle intensidad a su juego y acorralar a su rival.
A lo largo de la primera parte, el equipo azulgrana no tuvo demasiadas alternativas de velocidad en las transiciones. Sergio Busquets, Xavi Hernández e Ivan Rakitic le dieron seguridad a los pases pero nunca encontraban mal paradas a las líneas defensivas y de mediocampistas de los dueños de casa.
De hecho, la ocasión más peligrosa de los 45 minutos iniciales fue un disparo cruzado de Angel Lafita desde la izquierda que Claudio Bravo desvió con una atajada estelar.
Tanto Lionel Messi como Luis Suárez debieron esperar al complemento para poder desequilibrar.
Ya en la segunda mitad, el Getafe retrasó sus líneas y asumió un partido en el que la resistencia sería su factor determinante para conseguir un resultado positivo.
Mientras la lluvia se intensificaba y el área rival se poblaba de jugadores con la camiseta azul, el Barcelona comenzaba a resignarse a la idea de que el mayor peligro llegaría con jugadas de balón parado.
Así, el propio Messi estuvo a centímetros de poder romper la paridad a los 58 minutos, cuando estrello un muy buen tiro libre en la base del travesaño.
Poco después, el argentino desviaría un cabezazo y lanzaría otro tiro al palo, tras un pequeño desvío del portero Vicente Guaita.
Ya sobre el final, el Barcelona fue en busca de un revulsivo con la inclusión del juvenil Munir, pero no terminó de generar una ocasión clara de riesgo.

Para ver como deshabilitar las notificaciones, da clic aquí