EFE

Con la coronación de Racing Club como campeón del último semestre, el fútbol argentino cerró un año en el que dominó el escenario internacional y tuvo festejos para todos sus grandes equipos menos Boca Juniors, que despidió este 2014 sin alegrías.

River Plate, sin dudas, fue uno de los grandes vencedores de este año, ya que al título local que logró en el primer semestre le agregó la Copa Sudamericana hacia final de año, que le permitió ponerle fin a una serie de 17 años sin conquistas a nivel continental.

La primera etapa del éxito conducida por Ramón Díaz, el entrenador más ganador en su historia, le dio paso a un segundo semestre glorioso con Marcelo Gallardo como técnico.

El colombiano Teófilo Gutiérrez como bandera y los uruguayos Carlos Sánchez y Rodrigo Mora, sumados a Leonardo Pisculichi, el portero Marcelo Barovero, Leonardo Ponzio, Fernando Cavenaghi fueron algunos de los jugadores en un año de ensueño para el conjunto ‘millonario’.

Además River fue subcampeón en este último torneo local luego de ser durante gran parte del mismo el líder sin discusiones y con amplio margen.

El vencedor de este segundo semestre fue Racing Club, que también puso fin a una serie de 13 años sin conquistas, conducidos por Diego Milito, el ídolo que regresó a los 35 años para ser campeón.

El portero Sebastián Saja, Ricardo Centurión, el goleador Gustavo Bou, Luciano Lollo, el juvenil Yonathan Cabral, Ezequiel Videla y Leandro Díaz también fueron importantes para un equipo que ganó ocho de sus últimas nueve presentaciones para lograr la coronación.

En el plano internacional, los equipos argentinos lograron el pleno en este 2014 porque al título de la Copa Sudamericana para River Plate se sumó la conquista de la Copa Libertadores por parte de San Lorenzo.

De esta manera, y por primera vez en su historia, el ‘Ciclón’ consiguió el máximo trofeo continental bajo la conducción de Edgardo Bauza, que ya había sido el mejor de América con la Liga de Quito.

Leandro Romagnoli fue el símbolo de un equipo que contó con el nacionalizado paraguayo Néstor Ortigoza, Ignacio Piatti, el uruguayo Martín Cauteruccio, Juan Ignacio Mercier y Julio Buffarini como emblemas para escribir esta página importante en la historia de San Lorenzo.

En este 2014 además Independiente puso punto final a un año en la segunda categoría con su regreso a la elite del fútbol argentino.

Con Omar De Felippe como entrenador, ‘el Rojo’ consiguió que el primer descenso de su historia lo deposite sólo una temporada en la segunda división.

En el primer torneo desde su regreso, ya bajo la conducción de Jorge Almirón, Independiente fue cuarto detrás del campeón Racing Club, River Plate y Lanús.

En la Copa Argentina tras una inédita final con triunfo ante Rosario Central, Huracán consiguió el segundo título de su historia que luego coronó al lograr hacia fin de año el ascenso a la primera categoría.

De esta manera, el único equipo de los denominados ‘grandes’ que no tuvo festejos en 2014 fue Boca Juniors, que sufrió además las salidas de dos históricos: el técnico Carlos Bianchi y el emblema Juan Román Riquelme.

Hacia principio de año, Vélez Sarsfield se impuso ante Arsenal y se quedó con la Supercopa Argentina, mientras que Lanús perdió las dos finales internacionales que disputó en la Recopa Sudamericana ante Atlético Mineiro y la Copa Suruga frente ante el Kashiwa Reysol.

Para el año próximo el fútbol argentino se revolucionará con un torneo de 30 equipos que se jugará de febrero a diciembre para coronar sólo un campeón en 2015.

Con diez ascensos otorgados en los últimos seis meses, este formato se mantendrá sólo para la próxima temporada, ya que a partir de 2016 habrá modificaciones escalonadas para reducir hacia 2019 a 22 los participantes de la división elite del fútbol argentino.