CRÓNICA

El tren bala continúa su marcha, Cruz Azul ligó seis juegos sin caer y tras estancarse varias jornadas, ahora saborea la fase final. El “gallo” de muchos está de nuevo en la pelea. .
La Máquina recuperó potencia, silenció a Querétaro y da señales de ser el de antes.
Orbelín Pineda abrió la cuenta, el “Maguito” no festejó, pero el que vino después lo hizo al cuadrado.
Milton Caraglio pasó a la historia al marcar el tanto 10 mil en el estadio Azteca. El artillero celeste no se conformó con eso y anotó uno más. Los reflectores fueron suyos.
Querétaro carece de espolones, tampoco tiene brillo en su cresta. La expulsión de Alexis Pérez complicó todo y continúan en las sombras del torneo.
Cruz Azul maravilló y la siguiente semana reta al América.

EL PARTIDO
Tras salir con vida del BBVA, Cruz Azul volvió al Azteca motivado, listo para aumentar su racha de juegos invicto y pitar de nuevo para afianzarse en zona de Liguilla.
La Máquina prendió las calderas pronto, Yoshimar Yotún, con un tiro cruzado, probó los reflejos de Gil Alcalá.
El cuadro celeste se notó aceitado, Querétaro, con muchos problemas, pisó el área cementera. El “Keko” Villalva y Matías Britos trataron de llevarle balones a Ake Loba, pero la zaga celestes desarmó cualquier avance.
Cruz Azul siguió sólido y peligroso, Orbelín fue el siguiente en exigir a Alcalá, el remate de Pineda luego de un centro de Aldrete, pegó en el travesaño.
Los embates cementeros fueron tantos que la red no tardó en moverse. El “Maguito” hizo un truco básico, pero suficiente para vencer a Gil. Orbelín, ídolo queretano años atrás, prefirió no festejar.
Tras el tanto celeste el juego se volvió más soso, Gallos Blancos trató de enseñar la cresta, pero la Máquina rápido los frenó.
Cruz Azul tocó la pelota, buscó espacios y al mismo tiempo desesperó al rival. El esférico fue cementero.
Querétaro luchó, quiso cantar, sin embargo, no tuvo los espolones necesarios para hacerle daño a Chuy Corona. El equipo albiazul está roto anímicamente y en las penumbras de la tabla general.
La Máquina quitó el pie del acelerador, pero no dejó de avisar. Alvarado y Édgar Méndez por las bandas crearon peligro, Caraglio, también.
La locomotora avanzó sin contratiempos.
Antes de ir al descanso la tarde se le acomodó a los celestes tras la expulsión de Alexis Pérez por un pisotón sobre Orbelín.
Las distracciones fueron muchas, Corona estuvo cerca de equivocarse, pero el balón no entró tras un remate de Novaretti.
El árbitro decidió en ese instante ofrecerles un descanso a los combatientes.

EL COMPLEMENTO
Al volver al campo el “Rey Midas” modificó su esquema, Vucetich ingresó de un jalón a Jaime Gómez y a Jorge Rojas. Víctor Manuel quiso más solidez.
Caixinha dejó a las mismas piezas, pero no tardó en darle descanso a Orbelín. Jonathan Rodríguez ocupó su sitio.
Gallos, a pesar de estar en inferioridad numérica, le mostró los espolones a la Máquina. Querétaro buscó una hazaña.
La valentía queretana les pasó factura, Cruz Azul encontró espacios y Caraglio, muchas veces silbado y criticado, se encargó de incrementar la ventaja y marcar el tanto 10 mil en el Estadio Azteca. Historia pura.
Tras el festejo y los fuegos artificiales, la Máquina se dedicó a cuidar el juego.
Vucetich jugó su última carta con el ingreso de Jordi Cortizo, sin embargo, de poco sirvió. La Máquina no tardó en pitar otra vez. Caraglio sumó un tanto más a través de un penalti. Milton, ya reconciliado con la red, no falló.
Cauteruccio entró al campo sólo para estirar los músculos y cazar algún balón en un contragolpe.
El reloj siguió su marcha.
El fin llegó. La Máquina pitó, se quedó con todo el botín, pero perdió en la agonía del juego a Rafael Baca. Otro problema para Caixinha.

GOLES

ACCIONES