Fue en 2015 cuando José Luis Higuera llegó a Chivas, y pronto se vio envuelto en la polémica, primero se habló de que abiertamente era americanista, después él mismo dijo ser un empresario y conocedor de números y saber muy poco el futbol.

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Su primera aportación como CEO del grupo Omnilife-Chivas, fue echar al técnico José Manuel de la Torre, a quien corrieron cuando ya estaban entablando conversaciones con Matías Almeyda, incluso el argentino ya estaba en Guadalajara, y todavía no hablaban con el “Chepo”. La polémica y críticas quedarían en el pasado, después de que la mano de Almeyda llegó un título de Liga y campeonatos en Copa Mx.

En el tema de refuerzos, fue el artífice de la llegada de jugadores como Alan Pulido y Rodolfo Pizarro, aunque este último salió del club, algo que nunca le perdonó la afición rojiblanca, pues era ya un ídolo y referente del equipo tapatío. Tampoco le gustó a los seguidores del Rebaño que saliera Almeyda de la dirección técnica, pues salió entre dimes y diretes y al final hubo mucha molestia y roces.

Durante la gestión de Higuera, Chivas ganó un total de cinco títulos: una Liga Mx, dos Copa Mx, la Supercopa Mx y La Liga de Campeones de la Concacaf. A pesar de ello, el equipo se fue desinflando, después de que no funcionó José Cardozo como técnico, el equipo se volvió a meter en problemas de descenso, y en ese departamento deja al club justo como lo recibió, peleando la permanencia.

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Higuera comenzó siendo CEO, pero después pasó a ser Director Genral del equipo, llevando al banquillo a José Cardozo y ahora a Tomás Boy. En ese lapso anunció refuerzos como Orbelin Pineda, Hiram Mier, Alexis Vega, Rodolfo Cota, Josecarlos Van Rankin, entre otros. Además de ser quien aprobó la salida de José Juan Macias al León y ahora de Jair Pereira.

Su última polémica fue la de llevar a Chivas al delantero Oribe Peralta, quien tuvo un exitoso pasado americanista y no cayó tan bien entre los aficionados.