Houston.- La luna de miel estuvo cerca de concluir, el Tricolor, con sufrimiento extremo, superó a Costa Rica en tanda de penaltis y alcanzó a Haití en la siguiente fase.

Jiménez abrió la cuenta, el pase estaba en la bolsa, sin embargo, los costarricenses dieron pelea, Bryan Ruiz igualó el juego con un polémico penalti y obligó a que la batalla tuviera una emoción adicional.

La igualdad se mantuvo hasta la decisiva y cardiaca ronda de penaltis.

Raúl, de héroe pasó a villano, el atacante falló desde los once pasos, sin embargo, Leal le dio vida al Tricolor.

México la tomó, Ochoa le detuvo su tiro a Fuller y así, al borde de los nervios, el “Tata” y el Tricolor siguen en la pelea por el título.

Con problemas Houston, pero se avanzó.

EL PARTIDO

El gigante no esperó, México atacó y buscó herir pronto a un rival de cuidado. Costa Rica, a pesar de caer frente a Haití, siempre fue candidato para estar en el póquer de los mejores del área.

Jonathan Dos Santos con un tiro de lejos exigió a Moreira, el volante del Galaxy le ganó a Carlos Rodríguez la posición.

El Tricolor fue ágil, agresivo, Uriel Antuna y Rodolfo Pizarro gambetearon por las bandas. Los ticos sufrieron para frenarlos.

México tuvo el balón, lo movió, sin embargo, el tanto no estuvo cerca.

El juego se trabó, el “Tata” se contagió de lo duro del juego y discutió con el árbitro. La tensión creció.

Costa Rica tardó, pero comenzó a echar para atrás a los verdes. Celso Borges con un tiro al poste a través de un tiro libre, despertó a los ticos.

Joel Campbell y Mayron George pidieron el balón, se unieron y fabricaron opciones al frente. Rodríguez, Gallardo y Araujo fueron superados.

El equipo costarricense alcanzó su mejor nivel en el juego, Borges, tras una serie de rebotes en el área, le pegó al balón, pero se estrelló en el travesaño. México se salvó.

La batalla fue de ida y vuelta, los ticos mostraron energía y futbol.

La presión creció, el nerviosismo también, el Tricolor dejó de ir al frente.

México sufrió, sin embargo, antes de ir al vestidor, el goleador apareció. Raúl Jiménez, en buena maniobra individual, calmó la ansiedad azteca.

Con el pase momentáneo a semifinales vino una tregua en la contienda.

EL COMPLEMENTO

Al volver al campo el cuadro azteca apretó, Antuna, siempre por el lado derecho, estuvo cerca de provocar un autogol de Kendall Waston. Uriel fue un peligro constante.

México enseñó las armas al frente, sin embargo, atrás, vino una distracción. Gallardo y Rodríguez se perdieron en la marca, Campbell los superó con velocidad y potencia, se paró frente a Ochoa, Luis lo alcanzó y se barrió por detrás. El árbitro, lejos de la jugada, señaló un penalti sin serlo. La falta fue cuestionable, sin embargo, sucedió fuera del área. El fantasma de Arjen Robben regresó.

Bryan Ruiz no se fijó en eso, tomó el balón y con experiencia venció a Ochoa. El capitán tico lideró la reacción.

México quedó molesto, Jiménez, de lejos y en el área, intentó devolverle la paz a los mexicanos.

Costa Rica tuvo el momento anímico, el Tricolor mostró errores y angustia.

Matosas notó que la voltereta era viable e ingresó a Jonathan Mc Donald, Gustavo no deja su estilo agresivo y valiente.

La batalla fue ágil, los espacios se abrieron. La presión y el cronómetro comenzaron a darle un tinte trágico al juego.

En ese instante México perdió a su capitán, Guardado tuvo molestias físicas y le dejó su sitio a Carlos Rodríguez. Martino aprovechó esa pausa e ingresó al “Piojo” Alvarado, piernas frescas para el tiempo extra.

Charly, en su primer balón que tocó, lo estrelló en el poste.

El “Tata” quiso más potencia e inteligencia al frente, su última carta fue Luis Montes. El “Chapito” tomó la manija en la mitad del campo. Dos Santos salió lastimado.

Con escasos segundos en el reloj, vino otra pausa en el juego, hidratación y un cierre cardiaco.

TIEMPO EXTRA

Ya con escasa fuerza, pero mucho corazón, aztecas y ticos corrieron e intentaron destrabar el nudo. Rodríguez, Pizarro y Montes, a través de un tiro libre, lo intentaron.

Matosas se dedicó a aguantar, Calvo y Gamboa fortalecieron la mitad del campo.

Con más tensión que futbol, expiró el primer lapso.

Sin respirar, cambio de lado y siguió la batalla.

Martino metió a Héctor Moreno para tranquilizar y orientar a la zaga.

Costa Rica apretó, Jonathan Mc Donald con un tiro raso en el área, estuvo cerca de terminar el juego, Ochoa, con una atajada increíble, mantuvo con vida al Tricolor.

Ambos contendientes lo buscaron, pero el tanto agónico no llegó. La batalla se tuvo que definir en tanda de penaltis.