Tras la marcha de Dario Verón, en Pumas, Gerardo Alcoba parecía ser el heredero de la capitanía en la UNAM. En poco tiempo se ganó el respeto de la afición y fue uno de los mejores defensores del futbol mexicano. Sin embargo, su salida del club, su pase a Santos y su posterior marcha de la Liga MX se dieron prácticamente en la oscuridad.

Ahora, el uruguayo juega en Argentina, lo hace para Tigre, donde recientemente se coronaron campeones de la Copa de la Superliga, sin embargo, descendieron de categoría y jugará en la B Nacional.

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A pesar de lo anterior, el central no olvida su paso por México, donde aseguró, que más allá del cariño de la gente y los buenos momentos que pasó, no fue feliz:

“Viví muchísimos momentos de infelicidad. A veces las presiones o el estar lejos también te generan infelicidad. En México jugaba, pero no era feliz. La obligación de lograr objetivos deportivos y económicos te lleva a una presión que tienes que aguantarte”. En entrevista para ‘El Tiempo de Argentina’.

El futbolista habló también de las dificultades que tiene un jugador cada que se lesiona y las presiones que carga por no tener un futuro asegurado fuera del deporte:

“Jugamos muchas veces con lesiones, dolores y presiones. Tenemos exámenes semanales que te llevan de ser un héroe a liquidarte. Tienes 34 años, pero desde lo físico parece que tienes 70. Nosotros corremos una carrera contra el dinero, lamentablemente. La gran mayoría venimos de recursos muy bajos y la enfermedad de poder hacer una diferencia económica en poco tiempo te lleva a un desgaste total. Cuando lo logras, sientes el deber cumplido. Cuando no, terminas tu carrera y dices: ‘dejé todo en esto y no obtuve el premio’. Ahí viene la depresión”.