POR MIGUEL ÁNGEL GARCÍA
FOTO: JORGE BARRERA

EL horizonte puede cambiar radicalmente para el joven matador Salvador López, ya que iniciando el Año Nuevo tiene la gran oportunidad de torear en la Plaza México, el día cuatro, y con ello hacer que las empresas de provincia volteen a verlo para contratarlo con mayor frecuencia. Si bien Salvador no es un torero bastante visto por lo poco que ha toreado tras su alternativa, sí le hace falta el triunfo fuerte que llame la atención, argumento que tiene en la mesa recién iniciado 2015.
“Este año no ha sido fácil, si bien no se ha crecido profesionalmente, sí se ha hecho en el plano de la madurez. Tras mi confirmación de alternativa en la Plaza México se complicaron las cosas, incluso este año sólo toreé cuatro corridas de toros, en comparación con las ocho que formé el año pasado. Esto, considero, ha sido a consecuencia de no conseguir un triunfo importante en la Plaza México”, indicó López.
“Este mes estamos terminando una preparación intensa, pues ahora que me voy a presentar en la capital, espero dar un fuerte palo para que se me abran las puertas de provincia”, señaló Salvador, quien actuará el próximo cuatro de enero en una corrida de seis espadas, un festejo que podría ser sin grandes pretensiones, no obstante, de igual forma son de las tardes en que puede saltar la liebre de cualquier lado, dado que a los seis matadores les urge el triunfo.
“A diferencia de otras tardes en que se cuenta con dos toros, esta vez hay que hacer el esfuerzo ante un solo astado. Es un cartel que será muy importante para el aficionado, ya que todos los que estamos anunciados lamentablemente nos encontramos en las mismas condiciones y vamos con la firme convicción de echar para adelante. Me urge un triunfo para poder entrar al grupo especial, los seis vamos a arrear con todo”. Subrayó López, el de menor alternativa del sexteto de toreros que harán el paseíllo y a su vez el que prácticamente está menos visto.
“La situación está complicada para todos, se han disminuido las corridas, no es sencillo colarse a los carteles y la realidad es la falta de rotundidad en los triunfos. La mejor manera de abrir puertas es con las orejas, hay que echar el resto para poder salir adelante”, dijo el matador, quien además expresó que cuando no se torea por mucho tiempo, la ilusión es un alimento de casi todos los días, “de no perder la fe en uno mismo. Este año, al no haber corridas de toros en México para mí, me fui a España a aprender; lidié toros a puerta cerrada y conseguí tentaderos. Sin duda el estar en España me ayudó mucho en todos los aspectos”, añadió.
Salvador recuerda que, “cuando era novillero, en 2010, tuve una tarde muy buena en la Plaza México, me abrió las puertas de la provincia y con esa misma confianza voy el día 4, con el ánimo de triunfar para remontar mi carrera. Para llegar a la capital he hecho una preparación larga gracias al apoyo de un grupo de personas que me han ayudado mucho, además he toreado dos corridas de toros y tentado en Arroyo Zarco, La Estancia y Xajay, todo en este mes”, expresó el torero de 27 años.
-Ya ni te pregunto cuáles son tus deseos para Año Nuevo.
“Un triunfo en la Plaza México desencadenará todos mis deseos para 2015. No me queda más que desearles a todos lo mejor para este Año Nuevo. Va por todos ustedes mi actuación en la México”, concluyó.