Ante la falta de minutos y un panorama donde se vislumbraba como suplente, fueron razones suficientes para que se diera un mutuo acuerdo entre Rubens Sambueza y la directiva del Club León para facilitar la salida del jugador argentino, antes de marcharse desmintió haber tenido diferencias en el vestidor y con Nacho Ambriz.

Lego de un torneo vistiendo la camiseta esmeralda, Sambu sale del cubil felino para incorporarse a Pachuca. Después de la práctica del miércoles dijo adiós a la fiera.
“Hablé con el profe Ambriz y el presidente Jesús Martínez, para poder tener más minutos y uno respeta el equipo y la base del León que tiene uno de los mejores planteles del futbol mexicano y lo ha demostrado en los últimos tiempos, pero yo quiero jugar tener más minutos de juego. Siento que todavía puedo aportar y se tomó la decisión de irme”, comentó el argentino.

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“Los minutos que me tocó jugar los traté de hacer de la mejor manera siempre entregándome al máximo y hoy hay una oportunidad de poder tener más minutos y competir en Pachuca”, agregó.

En el Clausura 2019 registró cinco tarjetas amarillas y un cartón rojo, este último en la final de vuelta contra Tigrws. Con su historial de sanciones surgieron rumores que apuntaban a que su salida se daba por rencillas con sus compañeros y con el estratega Ambriz, tema que desmintió.

“Todas las cosas que se hablaron de que en el vestidor que había problemas y cosas raras son mentiras, con los compañeros he tenido una muy buena relación”.

Sobre el que será su sexto equipo en el balompié mexicano, señaló: “Con Pachuca las expectativas son las mejores, voy con deseo de aportar lo que se y de ayudar al equipo y con ganas de trascender en un gran equipo, a una gran institución que son una familia como lo fue acá cuando llegué”, finalizó el argentino.