POR ALEJANDRO ALFARO
FOTOS: RAMÓN ROMERO
ENVIADOS

Ciudad Juárez.- Pasan las semanas y parece que América padece de una amnesia severa. A las Águilas simplemente se les olvidó como ganar y este miércoles sumaron un nuevo empate, esta vez frente a Bravos en Ciudad Juárez.

Las bajas en el cuadro bajo afectaron notoriamente a los azulcremas. Su zona defensiva dio demasiadas facilidades y Diego Rolán se valió de eso para poner al frente a los de la frontera.

Desde la banca, Federico Viñas rescató el punto para los azulcremas con un gol cerca del final que sirvió nada más para no volver a casa con las manos vacías y decretar el 1-1 definitivo.

La crisis de resultados en Coapa es real y llegarán con esa carga al Clásico.

EL JUEGO

Días antes de presentarse a la cita del Clásico Nacional, América tenía que hacer una escala previa en Ciudad Juárez para enfrentarse a Bravos en la actividad de la jornada doble.

La losa con la que las Águilas llegaban a la frontera no era menor. Poco más de un mes sin ganar, es decir, cinco cotejos en los que los azulcremas no lograron sumar de a tres puntos, un bache que no se podían permitir en Coapa.

FC Juárez estaba de manteles largos y con un lleno pletórico en su casa, le pusieron complicado el panorama a los Millonetas. Y es que entre Mauro Fernández y Diego Rolán le pintaron la cara a la zaga crema. El “Rayo” logró meterse con toda la libertad del mundo hasta la línea de fondo por el sector derecho y puso un servicio medido a donde se encontraba sin marca Rolán. El delantero uruguayo, que sonaba hace poco para llegar al Nido, demostró su valía al conectar de cabeza a contrapié de Memo Ochoa, quien otra vez vio como la bola se iba a guardar dentro de su arco. ¡Gol de Bravos!

América no lucía bien. Facilidades en el cuadro bajo e inoperancia de medio campo hacia arriba fueron las constantes en la primera mitad. Aunque con todo eso, Giovani dos Santos tuvo el gol del empate al quedar frente a frente con Iván Vázquez y regalarle la bola con su disparo de zurda.

La molestia de Miguel Herrera era evidente. Para nada le gustaba lo que veía en el campo, principalmente porque los fronterizos, sin haber hecho mucho, los superaban en el marcador y los nulificaban en la cancha. Las modificaciones eran necesarias.

En el complemento, la postura de Juárez fue clara. Mantener el orden en defensa y aguardar por un América urgido del gol. El contragolpe sería su carta fuerte.

Del otro lado, los cremas tenían el balón, pero batallaron para poder generar peligro real sobre el arco rival. Apenas un par de cabezazos de Martín y Martínez, pero nada que en realidad inquietara a Vázquez Mellado y compañía.

Cuando parecía que la crisis de resultados americanista se acentuaría, Federico Viñas se hizo presente para conseguir la igualada.

El ariete uruguayo recibió la bola dentro del área, acomodó y disparó colocado y lejos de Vázquez para decretar la igualada. América lo empataba y quedaba tiempo en el reloj para algo más. Al final, Ochoa se mandó una gran atajada para salvar a los suyos y que el empate prevaleciera. América tiene amnesia, se olvidó de cómo ganar y viene ahora al Clásico.

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