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Mira

26, septiembre 2019 - 17:53

┃ Violeta Alva

nota-salas

Y por fin volvió.

Casi seis meses después de que fue operado del Tendón de Aquiles, Javier Salas volvió a las canchas. La rehabilitación del mediocampista fue a fuego lento, pero por fin llegó a su fin.

“La lesión me ayudó a tener paciencia, soy un tipo muy enérgico, muy desesperado, y la lesión llegó para decirme que tuviera calma tanto en el futbol como en mi vida. Tuve mucha calma, me tocó apoyar a mis compañeros desde afuera y me sentí muy feliz de ayudarlos dentro del campo”, reconoció Salas. “Fue muy complicado verlo desde afuera, yo quería ayudarlos dentro, pero desde afuera me acercaba y les decía lo que veía”, agregó.

Corría el minuto cuando entró de cambio por Yoshimar Yotún y rompió así con la inactividad de casi un semestre.

“Yo quiero dar lo mejor de mí y ayudar al equipo para primero estar en Liguilla y después pelear por el campeonato”, afirmó.

Sus seres queridos fueron clave para no perder la paciencia y saber que pronto llegaría el regreso al campo.

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“Siempre con la mirada en alto. Tuve a mi familia que me apoyó siempre. Con eso tuve, no pido más”, confesó.

Sobre todos los cambios que sufrió La Máquina en las últimas semanas, el futbolista agradeció todo lo aprendido por Ricardo Peláez y Pedro Caixinha, pero sabe que con Siboldi empezó un nuevo ciclo.

“Nosotros estamos muy agradecidos con lo que hizo Pedro, con lo que hizo Ricardo; son excelentes personas y trabajadores. Así es el futbol, sabemos que son ciclos y ahora con el profe Siboldi y su cuerpo técnico dar lo mejor de nosotros”, cerró.

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