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Mira

28, septiembre 2019 - 23:51

┃ Javier Juárez

Miguel-Herrera

Foto: Ramón Romero

A pesar de la cruda imagen, la lesión que le provocó Antonio Briseño a Giovani Dos Santos no pasó a más.
Reportes desde el hospital en el que fue intervenido el jugador azulcrema, aseguraron que el volante amarillo no sufrió alguna fractura.

Miguel Herrera, en conferencia, descartó lo peor: “No sé bien, pero parece que sólo es el corte, no es algo más”, dijo el “Piojo”.

¿Pero qué pasó en el campo?

El “Pollo”, con el ímpetu que lo caracteriza, quiso frenar un ataque de Gio, sin embargo, no midió su fuerza, levantó la pierna izquierda y su zapato, con tacos de aluminio, perforó el muslo derecho de Giovani.

Dos Santos cayó al piso y lo primero que hizo fue gritar y pedir auxilio al ver el agujero en su extremidad.
Fernando Guerrero vio todo y como ráfaga le sacó la tarjeta roja al zaguero tapatío.
Guido Rodríguez notó el resultado de la agresión y de inmediato pidió el ingreso de las asistencias.
Federico Viñas y Renato Ibarra se llevaron los brazos a la cabeza.
Memo Ochoa y Paul Aguilar, del otro lado del campo, corrieron hasta el lugar de los hechos y empujaron a Briseño.
El árbitro calmó los ánimos y le volvió a mostrar el cartón colorado a Toño. El defensa rojiblanco salió cabizbajo, consiente del daño que hizo.
El doctor azulcrema observó a Gio y sin dudarlo pidió su cambio.
Andrés Ibargüen, sin calentar, ocupó el sitio de Giovani.
Dos Santos, con poca actividad en el torneo por diversas lesiones, parece que se pierde lo que resta de la competencia.
Lo del “Pollo” fue viril, pero mal ejecutado.

DIRECTO AL HOSPITAL
El antes jugador del Galaxy subió a la ambulancia, Nicolás Castillo estuvo al pendiente de él lo más que pudo y luego dejó que los expertos trabajaran.
Giovani, sin tiempo que perder fue trasladado a un hospital del sur, su papá Zizinho lo acompañó y quedó al pendiente de conocer la gravedad de la lesión.