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11, octubre 2019 - 0:08

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Guasave.- El regreso de los Algodoneros de Guasave, tras una ausencia de cinco temporadas en la Liga Mexicana del Pacífico quiere que sea a lo grande, primero estrenando el remodelado estadio Francisco Carranza Limón, y segundo, presentando un equipo de muy buen nivel, que sea protagonista.

Bajo la dirección del manejador Rigoberto Beltrán, el nuevo dueño, Alfredo Arámburo se ha estado esmerando por hacer bien las cosas, con el fin de que los aficionados tengan toda la confianza que tendrán un equipo competitivo.

Dentro de los movimientos que hicieron, previo al arranque de la temporada, está la del pelotero dominicano Olmo Rosario, un jugador extranjero bien identificado con los aficionados que llegó a tierras guasavenses con el fin de ofrecer todo lo que sabe hacer en el terreno y con el madero.

El jardinero se dijo listo y comprometido a dar lo mejor, luego de sostener una buena pretemporada, de al-to nivel.

“Siempre que uno inaugura un parque quiere dar lo mejor, tener la mejor participación y no tiene que ser ganando la corona, simplemente estar entre los cuatro, entre los cinco, entre los tres en playoff, que ya eso es un mérito para el equipo”.

“Desde que firmé aquí estoy comprometido con el equipo, tratando de ayudar a que camine bien, juego tras juego”, expresó.

JÚNIOR ROSARIO

Otro jugador, con un paso de 10 años en el beisbol profesional, se dice fácil, y más cuando se pasó por casi todos los niveles del beisbol en Estados Unidos, lo cual, en este caso, opera con José Júnior Rosario, de quien se espera mucho para los trabajos del bullpen con los Algodoneros de Guasave.

Nativo de Nueva York, Rosario sabe lo que es jugar desde el nivel Clase A hasta el Triple A, además de haber jugado pelota invernal en las importantes ligas de Venezuela (Magallanes) y República Dominicana (Estrellas de Oriente).

Por eso es que se habla de que será un refuerzo clave, ya que su brazo derecho tendrá la misión de hacer relevos de calidad en momentos apremiantes durante la temporada 2019-2020 de la Liga Mexicana del Pacífico.

Profesional desde el 2008, cuando fue firmado por Cachorros de Chicago, pasó por todos los niveles de Li-gas Menores, sin embargo, una lesión que sufrió en el 2015 lo dejó fuera de toda actividad, y eso frenó su as-censo a Ligas Mayores.

Viene de jugar en la fuerte Liga del Atlántico, que es una de las mejores en el sector independiente en Estados Unidos.

De acuerdo a los scout, el derecho tiene control, lo cual muestran sus 483 ponches, a cambio de 243 bases por bolas en su carrera, en la que tiene marca de 31-38, siendo en la mayor parte del tiempo un pitcher de relevo, que incluso, tiene 24 rescates en 560 innings lanzados.

Su efectividad de ponches muestra que abanica a 7.8 rivales por cada nueve entradas, lo que es sinónimo, que aparte de velocidad, cuenta con un buen repertorio de lanzamientos y mucho control.

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