El Bayern de Múnich, pese a no brillar ni disipar las dudas generadas en las últimas semanas, se impuso 2-1 al recién ascendido Unión Berlín (15º) y se colocó líder provisional de la Bundesliga, este sábado en la 9ª jornada.

Con 18 puntos, el Bayern queda ahora con uno de ventaja sobre el segundo, el Friburgo, que venció 2-1 al RB Leipzig (6º), mientras que el Borussia Dortmund es tercero a dos puntos de los muniqueses, tras no pasar del empate sin goles (0-0) en el campo del Schalke 04 (7º).

El Borussia Mönchengladbach (4º) y el Wolfsburgo (5º), que comenzaron el fin de semana igualados al frente de la clasificación, quedan a dos puntos del Bayern, a la espera de sus partidos del domingo como locales contra Eintracht de Fráncfort (8º) y Augsburgo (17º), respectivamente. En caso de ganar, volverían a pasar por delante del equipo de Múnich.

El Bayern consiguió su trabajada victoria gracias a los tantos del francés Benjamin Pavard (minuto 13), que marcó con un disparo desde fuera del área tras un rechace, y del polaco Robert Lewandowski (53), que aprovechó un rebote en un rival para enviar un disparo cruzado en la entrada en el área.

Manuel Neuer detuvo un penal en el minuto 58, a disparo del sueco Sebastian Andersson, pero no pudo parar otra pena máxima, en el 86, a tiro de Sebastian Polter.

Lewandowski, que suma ya 13 dianas en esta Bundesliga, batió un récord al convertirse en el primer hombre en marcar al menos un tanto en las nueve primeras jornadas del campeonato. Hasta ahora compartía la marca con el gabonés Pierre-Emerick Aubameyang, que anotó en las ocho primeras jornadas del campeonato para el Borussia Dortmund en la campaña 2015-2016.

En la Bundesliga, el Bayern apenas había sumado un punto (derrota 2-1 en casa contra Hoffenheim, empate 2-2 en Augsburgo) en sus dos jornadas anteriores.

Uriel Antuna, cerca de Chivas

Esta semana había podido reencontrarse con la victoria en la Liga de Campeones, con un 3 a 2 en el terreno del Olympiakos griego, pero en un partido donde el Bayern también tuvo que esforzarse para lograr un triunfo deslucido y por la mínima.