Fotos: Alejandro Villa

Los 20 millones que se utilizaron para la remodelación, fue dinero perdido, ya que la alberca semiolímpica “Paola Espinosa”, ubicada en la Unidad Habitacional Villa Panamericana, sólo abrió sus puertas ese día, para después quedar nuevamente cerrada.

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A poco más de un año en que señalaron las autoridades que el lugar sería para el esparcimiento de niños, niñas, jóvenes y adultos, la población coyoacanense ahora se dice engañada, ya que los servidores públicos de la entonces delegación Coyoacán, se hicieron ojo de hormiga y la alberca hoy luce abandonada, con el agua contaminada y fisuras en las paredes.

Este escenario que es en honor a la medallista olímpica Paola Espinosa, quien estuvo presente junto a su esposo Iván García, también medallista olímpico, fue inaugurado el 3 de septiembre de 2018 por Edgar Jiménez Santillán, ex jefe delegacional de la demarcación y Manuel Negrete, éste último hoy alcalde de Coyoacán.

Con bombos y platillos se llevó a cabo el evento donde dejaron entrenar a nadadores y clavadistas para que vieran el funcionamiento. Niños y niñas también llegaron para conocer a una de las máximas figuras del país e inscribirse y aspirar a ser como ella. Pero pronto, con la decepción y las dudas del porqué no la abrían, comenzaron a decepcionarse, sus sueños quedaron truncados ante la gran mentira que les habían prometido las autoridades.

Ahora nadie se acerca porque luce vacía, abandonada, de las fisuras de las paredes corren alimañas y se filtra la lluvia. Solamente la placa con el nombre de “Paola Espinosa” les da esperanzas de que un día tengan un sitio para prepararse, hasta llegar a ser una figura como la que en estos momentos es un ídolo.

Algunas personas del lugar manifestaron que es una vergüenza que de repente llegue un funcionario y haga una fiesta o reunión para con sus allegados o que les digan que pronto la volverán a echar a funcionar. Mientras que los administradores no desean hablar por temor a perder sus puestos.

Asimismo, los policías no dejan acercarse, porque no hay acceso a la alberca. Y mientras se sigue deteriorando, la comunidad coyoacanensecontinúa con la esperanza de tener un espacio para que sus hijos y los jóvenes se adentren a alguna actividad deportiva.

REDES SOCIALES

Paola, ese día escribió en sus redes: “Con esta inauguración también establecemos una relación con Coyoacán, para que niños y jóvenes de mi fundación puedan asistir a la alberca, en promoción del ejercicio y combate a la obesidad, sobrepeso y bullying infantil”.

Ahora se trató de contactar a la clavadista, pero ya no desea saber nada de algo que esperaba fuera fructífero.