Con la tecnología de Google Traductor

13, noviembre 2019 - 20:36

┃ Guillermo Martínez

nota-diosdado

POR GUILLERMO MARTÍNEZ G.

Ni el doping que se le detectó después de los Juegos Centroamericanos de Mayagüez 2010, pudo impedir que la sirena Nuria Diosdado llegue a sus terceros Juegos Olímpicos, ahora en Tokio 2020, con mayor sabiduría hacia la vida.

Serena, con la mente en alcanzar una presea en esta justa en la que podría decir adiós a una gran carrera de altibajos y recompensas, manifestó:

RECIBE LAS NOTICIAS DIRECTO EN TU WHATSAPP, SUSCRÍBETE AQUÍ

“Fue más el orgullo y el honor de superar ese trago amargo lo que me hizo seguir adelante. Fácilmente hubiera dicho que me alejaba, que dejaba todo y hacer otra vida alejada del deporte, pero quise demostrar que tengo honor y me pude levantar con mucho orgullo”.

Sus ojos color verde muestran una mujer centrada en sus objetivos, con sinceridad, centrada en sus anhelos de seguir representando a México.

“Hubo tristeza, desilusión, pero también personas a mi alrededor que me ayudaron a decir que podía hacer más. Entonces me propuse llegar a Londres 2012 y después a Río 2016. Fue un trabajo duro, constante, pero con la mente en los objetivos”.

Clasificada a Tokio 2020 en el dueto de natación artística, también está peleando porque el equipo logre el boleto.

“Hay que ir todas, ya que somos una familia y peleamos juntas. Para mí es una satisfacción muy grande el estar con ellas y ver cómo luchan por sus sueños, así como pelee por los míos. Cada día el entrenamiento me renueva y me hace sentirme plena, ya que he logrado mucho”.

Nuria comunicó que tienen nuevas rutinas con música diferente, pero ya seguras de tener el pase a la justa veraniega.

“Ya no estamos con la presión de buscar clasificar, sino en mejorar los pases con la nueva música que hemos elegido. Vamos lentamente, pero con seguridad. Mientras que también ayudamos a las chicas del equipo, ya que tendrán el preolímpico el año entrante en abril en Japón. Es importante la competencia y debemos apoyarlas al máximo”.

La ondina agregó que se siente satisfecha, en horas extras de lo que esperaba de ella misma, luego de los Juegos de Río.

“Son los años en que más empeño he puesto, además terminé mi maestría, ahora todo gira en este nuevo reto, ya que también el cuerpo se cansa, por lo que llevo las rutinas con más inteligencia. Quiero llegar a mis terceros olímpicos no sólo para participar, sino para superar el onceavo lugar de los pasados Juegos”.

Con toda la historia que ha creado en su ser, dijo que se siente una mujer exitosa y que siempre dio a conocer su deporte como toda una profesional.

“Mi pareja me apoya, sabe que este es un sueño más y me deja hacer para seguir mostrando todo lo aprendido. Estoy más equilibrada y ahora me gusta más mi deporte porque he llegado hasta donde he querido y ahora gozo todo eso”.

NÚMERO: 6

Fue el número de medallas que logró en los Juegos Centroamericanos de Mayagüez, mismas que después le retiraron por haber dado positivo de clembuterol.