México, 5 Ene (Notimex).- Luego de un 2014 inesperado debido a lesiones, la clavadista mexicana Paola Espinosa se encuentra motivada para afrontar el 2015 de la mejor manera, sabedora de la competencia que hay, pero con los objetivos claros.

“Estoy bien y contenta, desde septiembre estoy en buena preparación física, ya para hacer clavados de grado de dificultad, distinto al año pasado que tuve lesiones. Me siento recuperada de la espalda y rodillas, sin molestias, espero que este año pueda tener el nivel que estoy esperando”, dijo.

Luego de partir la Rosca de Reyes en el Ceforma, al sur de la ciudad de México, la doble medallista olímpica no deja de soñar y tiene la mira puesta en los Juegos Panamericanos Toronto 2015 y el Mundial de Natación en Kazán, Rusia, en busca del boleto a Río 2016.

“La meta y el objetivo es llegar al Campeonato del Mundo y ahí conseguir el pase individual a los Juegos Olímpicos, me gustaría estar en Panamericanos, los pasados fueron en México y me tocó ganar, y espero que en Canadá también, me siento bien para poder pelear”.

Paola trabaja la misma rutina de clavados de sus últimas apariciones, tanto en trampolín como plataforma, y será más adelante cuando, junto a su entrenadora Ma Jin, decida en cuál de las dos pruebas participa en las competencias, pero “me siento bien en las dos”.

Desde los tres metros hace equipo con Dolores Hernández y en los 10 metros con Alejandra Orozco, con quienes estará en la Serie Mundial, que consta de seis fechas y que arrancará en marzo con las citas en Beijing y Dubái.

Por otra parte, auguró que el selectivo nacional para acceder a los Panamericanos y al Mundial, será de los más reñidos en la historia de los clavados, “van a ser competencias de alto nivel, este deporte está creciendo”.

Agregó que para ella, que es más veteranos no se puede quedar sentada, “debes exigirte más, vienen más personas detrás de ti, entreno con niñas que han subido de nivel, será un nacional de mucho nivel y el más fuerte que se ha visto hace muchos años”.

Espinoza dejó en claro que vive uno de los mejores momentos de su carrera profesional, pues nunca deja de aprender y de sentirse más madura conforme pasan las competencias, “estoy mucho mejor, más madura física y mentalmente que en Beijing y Londres”.