POR HORACIO SOTO CASTRO
FOTO: JUAN RAMOS

JOSÉ Luis Angelino también mostró su felicidad por la actuación que tuvo en la Plaza México cortando dos orejas y en tono seguro expresó: “Creo que recuperé mi credibilidad y el sitio dentro de los ruedos. La de ayer fue una tarde muy importante para el futuro en mi carrera y es el principio para escalar muchos escalones más”.
Consideró que 2014 fue un año positivo pues regresó a muchas ferias importantes y logró torear 20 corridas y regresar a Colombia y “pude reafirmar en la México, todo lo que hice el año pasado con una faena que gustó a todos. El toro tuvo calidad, pero justo de fuerza y le saqué los muletazos”.
Angelino, como sus compañeros venía por todas y estuvo valiente, primero al cuajar tres largas cambiadas y “cuando estuve en el centro del ruedo los pitones me pasaron rozando. De pie fueron verónicas emotivas y templadas con un remate vistoso. Después el quite por chicuelinas que me corearon”.
El diestro tlaxcalteca dijo que le salió del corazón invitar a dos de los subalternos distinguidos del momento, pues es un reconocimiento e inusual que alternara con dos subalternos. “Yo soy parte de una familia de banderilleros como es mi padre y mi hermano y fue bien visto el momento y salió bonito”.
Fue la quinta salida a hombros de la Plaza México, pero ahora fueron por dos orejas en un solo toro y las anteriores porque cortó una oreja en cada toro. “Cardenal fue un toro agradecido y había que matarlo bien.
“Lloré de emoción -dijo Angelino- pues me preparé para retomar el sitio que tuve”.
José Luis Angelino ya probó las mieles de la gloria cuando se sentó en los cuernos de la luna como triunfador de una temporada en la México y lo amargo del declive hasta llevarlo a tener malos pensamientos como el de retirarse de la profesión hasta quitarse la vida. Se repuso y borró todos esos malsanos pensamientos y volvió a tomar en serio su vocación.
“Muchos me han felicitado -apuntó- por haber regresado a lo que es mi vocación, superando todo lo negativo. Ahora entreno intensivamente para estar bien preparado y hacerle honor a mi vocación”.
Espera regresar pronto a la Plaza México, que bien merecido lo tiene.
El 18 de enero regresará a Colombia a torear en una población llamada Uvaque y el 25 a Tlaltenango y otras corridas con los que están por concretarse con su apoderado.