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Con 17 jornadas por delante para conservar la permanencia en la Primera División del futbol mexicano, Leones Negros de la Universidad de Guadalajara (UdeG) se reforzó con todo para encarar esos partidos que le permitan conseguir el objetivo.

Luego de 20 años de ausencia en el máximo circuito y con un semestre en el que ha batallado para salir de la zona de descenso, el conjunto tapatío está ahora ante un reto que requerirá de todo su potencial para conseguirlo.

Ubicado en el último lugar de la porcentual con un cociente de 1.0000, el conjunto dirigido por Alfonso Sosa tiene ante sí el reto de pelear con todo en el Torneo Clausura 2015 para evadir el descenso y, de paso, buscar trascender en el mismo.

Por lo tanto, encarará dos torneos, uno para evitar descender y otro para tratar de meterse a la pelea por el título, éste último llevará a conseguir el primero, por lo cual la directiva puso toda su confianza en los jugadores de reciente ingreso.

Así, los directivos del conjunto “melenudo” abrieron la chequera para impulsar el proyecto del timonel con la llegada de los ecuatorianos Jonathan González, Fernando Guerrero y Juan Anangonó.

De la misma manera, trajo tres jugadores del mercado nacional para darle forma al cuadro que pretenden logre salvarlos en este certamen, que define al equipo que cederá su lugar al que venga del Ascenso MX.

Los jugadores mexicanos son Jahir Barraza, Rodolfo Vilchis y Giovanni León, quienes junto con los refuerzos ecuatorianos y sus demás compañeros tienen en las manos una papa caliente que se asa en el infierno del descenso.

La ventaja con la que cuenta el conjunto tapatío es que su cociente es volátil, tanto si gana como si pierde; es decir, cuando suma de a tres puntos gana muchas posiciones, lo mismo que si pierde, pues cae en espiral escalones abajo.

De ahí la importancia de hacer un excelente torneo, pero sobre todo sacar provecho de su condición de locales, y lo que saque de visitante será bueno, toda vez que en el torneo pasado tuvo una campaña irregular en la que apenas sumó tres triunfos.

Entonces, desde ahora está con la obligación de comenzar a sumar desde el primer encuentro, que será ante Rayados de Monterrey en el estadio Jalisco, para meter presión a los otros equipos contra los que luchará por la salvación.

Así, Tiburones Rojos de Veracruz, que tiene un cociente similar de 1.0000, mismo que Puebla, así como un poquito más arriba, Chivas de Guadalajara cuyo promedio es de 1.0353, tienen la moneda en el aire.

Sin embargo, el timonel Alfonso Sosa confía en que con los refuerzos que vienen a apuntalar el equipo con el que se cuenta, las cosas se den como lo espera: hacer un buen torneo y conseguir la permanencia por muchos años más.

“La adquisición de estos jugadores nos ilusiona, hay objetivos claros para el siguiente torneo”, mencionó el estratega durante la presentación de los jugadores que llegaron para este campeonato a luchar por salvar al equipo.