CRÓNICA

POR RUBÉN BERISTÁIN
FOTOS: LUIS GARDUÑO
ENVIADOS

Hidalgo.- La magia se quedó en la Perla Tapatía y Chivas no pudo ante Pachuca en la segunda jornada del Clausura 2020.
Los Tuzos le hicieron frente al plantel reforzado de Guadalajara y estuvieron cerca de propinarles su primera derrota del torneo, pero el Rebaño tuvo mucha suerte.
Ni Macías, tampoco Antuna, mucho menos el Chicote pudieron cambiar el marcador a su favor. Los rojiblancos quedaron a deber.
Las emociones no faltaron, intentos hubo por doquier, pero el balón no quiso entrar. 0-0 final.
Todo quedó en donas para el café. Para desgracia de ambas instituciones, no hubo ningún Pocho que lograra cambiar el resultado.

EL JUEGO
La tierra de los pastes se vistió de gala con la visita del Rebaño Galáctico. No fue cualquier día en una Bella que se pintó rojiblanca por cada rincón. Ni siquiera la baja temperatura fue pretexto para ver el inmueble con un lleno espectacular.
Como si el destino mismo se los hubiera adelantado, Pachuca y Chivas se vieron las caras en el estadio Hidalgo después de una semana donde los unió el tema de Pocho Guzmán y su antidoping positivo.
Dicen que alineación que gana, repite y ese fue el caso de las Chivas. El timonel Luis Fernando Tena no especuló y mandó el mismo once con el que triunfó la primera jornada ante FC Juárez. Además se dejó en el banquillo a suplentes a hombres de la talla de Chicote Calderón, José Juan Vázquez, Uriel Antuna y Oribe Peralta. Ese es el lujo que tiene el Flaco con un plantel lleno de estrellas.
Hidalgo se convirtió en una capital rojiblanca. Un Huracán completamente tapatío se dio cita para presenciar a uno de los mejores planteles de Guadalajara en los últimos tiempos. La respuesta visitante, o local, fue inmejorable. Los Tuzos fueron minoría en su propio recinto y fueron opacados.
Ese dominio en la tribuna se transportó al terreno de juego. Con el “Chivas, Chivas” al unísono, los jugadores se animaron y se adueñaron del esférico.
El joven del momento fue el más insistente. José Juan Macías estuvo cerca, pero su remate de media tijera salió por un costado. Los atacantes rojiblancos lo sabían y tenían que aprovechar el nerviosismo de Alfonso Blanco, quien no lució seguro bajo los tres postes y por ello, su competencia, Óscar Ustari, ya vuela rumbo a México. De hecho, el cancerbero de Pachuca estuvo cerca de meterse en problemas por un mal rechace, sólo que Isaác Brizuela desaprovechó el regalito. El Conejito nunca lo esperó.
Los hidalguenses reaccionaron. Romario Ibarra mostró su velocidad en varias ocasiones, pero la fortuna no estuvo de su lado.
El combate se enfrascó en un agradable ida y vuelta. Los locales quisieron herir con transiciones rápidas y un juego de primer toque, no fue suficiente.
Caso contrario ocurrió para los pupilos de Paulo Pezzolano. Los sonoros abucheos de los que fueron víctimas los ayudó a sacar la casta y cambiaron el rumbo del juego. Fueron ellos quienes terminaron más cerca de la anotación, sólo que Franco Jara no encontró nunca el marco rival e Ibarra se encontró con un muro sagrado. Los Tuzos hostigaron, estuvieron cerca, pero no lograron el gol.
Rubens Sambueza vivió un duelo aparte. Su pasado americanista fue recriminado en varias ocasiones, él lo disfrutó a lo grande siempre con una sonrisa y respondió con sus grandes dotes con el balón.
El complemento no cambió y siguió el dominio de Pachuca. Romario Ibarra, sin ninguna carga en las piernas, demostró una vez más su velocidad, pero falló en el último toque. El portero José Rodríguez se alzó como héroe y le tapó el mano a mano. El ecuatoriano no lo creyó y se llevó las manos al rostro. Oportunidad desaprovechada.
Chivas respondió y Tena mandó a su artillería pesada. Uriel Antuna y Cristian Calderón, quien hizo su debut, tuvieron minutos. Pero ni el Brujo y mucho menos el Chicote lograron cambiar algo.
El Rebaño no pudo en la Bella Airosa. En la tribuna fueron justos vencedores, pero en el campo les faltó la magia de las Chivalácticas.

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