Foto: Archivo ESTO

La guerra de poderes dentro de la Federación Mexicana de Tenis está en su punto más alto.

Mientras el actual presidente José Antonio Flores Fernández contempla una Asamblea para el día de mañana en la ciudad de Campeche, donde junto a los miembros del Comité de la FMT tiene planeado reelegirse como el mandamás del “deporte blanco” nacional, en la vereda de enfrente distintos presidentes de asociaciones convocaron para este jueves a una Asamblea General Extraordinaria donde esperan ponerle fin al polémico ciclo del dirigente mexiquense.

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Cansados del estancamiento en el que se encuentra el tenis mexicano, la falta de apoyos y las constantes peleas con las diferentes asociaciones, un grupo encabezado por el primer vicepresidente de la FMT, Mario Chávez, y José María López Ferráez, hicieron un llamado y aseguran que la Asamblea que se llevará a cabo en el Club Casino San Ángel será 100% legal. Sin embargo, la propia Federación Mexicana de Tenis ha emitido un comunicado donde asegura que un juez ha suspendido dicha asamblea.

De acuerdo a la información que ha trascendido, la oposición tiene asegurada la presencia de al menos 15 de las 32 asociaciones que conforman el órgano rector del tenis en México, esperanzados de que el resto de dirigentes también puedan acudir al evento.

Después de varios días sin mostrar su postura, Toño Flores lo hizo por medio de un comunicado donde muestra una serie de leyes de la FMT que indican que el único que puede convocar a una Asamblea es el propio presidente, por lo que el evento que se realizará en el Casino San Ángel no tiene validez alguna. Esta teoría fue desechada minutos más tarde por los propios Chávez y Ferráez, quienes aseguraron para ESTO que siguen firmes y dispuestos a acabar con uno de los períodos más obscuros del tenis mexicano.

SÍ BUSCA LA REELECCIÓN

A su llegada a la silla presidencial de la FMT en el 2016, José Antonio Flores tenía claro que su período se acabaría cuatro años después, desechando en primera instancia la idea de la reelección. Hoy en día su postura ha cambiado y confía en recibir el voto de confianza por parte de la mayoría de los presidentes de asociaciones en el país.

“Sí, definitivamente así lo acordamos junto a mi consejo directivo, pero los que decidirán son los que asistan a la Asamblea. Si no les interesa que yo quede como presidente la entregaré, pero buscaré que se quede  alguien que quiera trabajar. Es cierto que dije que no iba a buscar la reelección, pero me tardé cerca de tres años en atender los vicios que había en la FMT”, manifestó el dirigente en entrevista con ESTO.

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“No es necesario que sea yo el elegido, no me muero por conseguir la permanencia. Necesitamos la unidad de nuestro deporte, buscaré que las cosas se hagan bien y lo más transparente posible”, añadió.