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24, febrero 2020 - 20:32

┃ Rubén Beristáin

siboldi

 

POR RUBÉN BERISTÁIN

FOTOS: ALEJANDRO VILLA

Cuando se enfrenta un equipo de gran jerarquía como Cruz Azul ante un rival más modesto como el Portmore United, podría pensarse que el resultado luce obvio y favorecería a los mexicanos, pero eso pasaba en antaño y ya no en la época actual.

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Para Robert Siboldi, técnico cementero, esas brechas que antes se veían se han reducido y ya no se gana ningún partido con la camiseta.

El que piense que hoy se gana fácilmente, no ha visto el futbol últimamente. Hay que preguntarle a Tigres lo que les costó y también a América en Guatemala, no comparto que se gane con la camiseta, eso ya no pasa”, expresó el charrúa, en la conferencia previa al cotejo ante el Portmore United. “Hoy en día no hay rival sencillo ni fácil, tampoco se gana antes de jugar el partido. Todos los rivales son complejos, ellos tienen muy clara su idea, nosotros intentaremos controlarlos y contrarrestarlos. Hay que estar muy atentos“, expresó con cierta preocupación, pero con la confianza intacta en ganar.

A pesar de que el club jamaicano saldrá con la tarea de revertir el marcador, el estratega uruguayo sólo piensa en sacar un resultado positivo del Coloso de Santa Úrsula. No tiene otra opción en la mente y jugarán con la desesperación de los isleños.

No pensamos en qué vamos a perder. Vamos a ganar y pensamos en seguir avanzando, siempre con respeto y humildad. Vamos a transmitir esa idea de ganar y proponer, ellos vienen abajo en el marcador y no les sirve el empate, es claro que no están acostumbrados a jugar en la altura. Habrá que ver qué es lo que priorizan, no creo que aguanten el ritmo, pero hay que salir con todo desde el inicio”, remató.

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La falta de contundencia que tuvieron en Centroamérica fue un duro golpe que por poco y les sale caro. Ahora en la vuelta buscarán anotarle todas sus oportunidades desde el inicio. “Fallamos en el último tercio, en la definición. Si hubiéramos metido las opciones que tuvimos otro partido hubiera sido. Eso trajo que el rival encontrara el gol, un tanto fortuito, fue circunstancial, pero fue rescatable la capacidad de reacción, de luchar hasta el último minuto y no bajar los brazos”, finalizó.

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