POR JORGE BRIONES

ENVIADO

FOTO AFP
Acapulco, Guerrero.- Y llegó el turno del máximo favorito al título.
En medio de la gran expectación que levantó su presencia, por quinta ocasión, en el Abierto Mexicano de Tenis, Rafael Nadal respondió con una magistral clase en lo que fue su regreso a la competición después de un mes alejado de las pistas tras su eliminación en el Australian Open.

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Fue un inicio atípico para el actual número dos del mundo, con el Estadio Pegaso a la mitad de su capacidad debido a que en el Grand Stand la mexicana Renata Zarazúa dio la campanada del evento. Mientras los gritos de “México-México” se escuchaban a lo lejos, Rafa se dejó sorprender en su primera oportunidad al saque y estuvo 0-2 en el primer episodio, pero pronto corrigió el camino para sellar su victoria 16 en Acapulco con parciales de 6-3 y 6-2 sobre el también español Pablo Andújar.
Fueron 90 minutos los que le tomó al ganador de 19 Grand Slams clasificarse a la segunda ronda de un torneo que lo ha hecho sentir como en casa. Rafa ajustó en el momento oportuno y consiguió seis puntos sin respuesta en la segunda manga y liquidó la contienda con su servicio, ese que tanto ha mejorado desde que Carlos Moyá se sumó a su equipo de trabajo en el 2018.
Nadal contabilizó cuatro ‘aces’, el 59% de efectividad con su primer servicio y le quebró el saque a Andújar en cinco oportunidades. Con esta victoria deja el historial ante su compatriota con marca perfecta de 4-0.

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Ahora le espera el serbio Miomir Kecmanovic, rival que ya dio la cara al vencer a Alex de Miñaur en la jornada inaugural y que se presentará en la cancha central con todo que ganar y nada que perder. El dos veces campeón de Acapulco pegó primero y dijo presente en la edición XXVII del mejor torneo de tenis en Latinoamérica.