Con la tecnología de Google Traductor

Mira

30, marzo 2020 - 18:59

┃ José Ángel Rueda

ESPECIAL

POR JOSÉ ÁNGEL RUEDA

Ni en tiempo de cuarentena dejan de agitarse los pañuelos blancos en Barcelona. La ya de por sí gastada gestión de Josep María Bartomeu recibió de nuevo uno de esos golpes fulminantes. El parón obligado debido a la contingencia sanitaria ocasionada por el Coronavirus acercó un poco más al presidente a la puerta de salida. Esta vez por su falta de gestión ante la inminente crisis económica, o quizá porque el vestuario, liderado por Lionel Messi y los demás pesos pesados como Piqué y Sergio Busquets, ya no cree en su proyecto.

Messi aclara, la plantilla está de acuerdo con la reducción de salarios 

Dicen los que lo conocen que Messi es un tipo callado, pero que cuando habla es porque tiene algo importante que decir. El jugador argentino ha salido una vez más a dar un comunicado oficial a través de su cuenta de Instagram. Su mensaje, en apenas segundos, fue leído por sus poco más 146 millones de seguidores. En él, el capitán azulgrana dejó clara su intención de reducir su salario hasta un 70 por ciento con tal de aminorar los devastadores efectos de la pandemia. El anuncio, sin embargo, llevaba su reclamo, al asegurar que no dejaba de sorprenderle que desde el club buscaran meterles presión para hacer algo que ellos mismos estaban dispuestos a hacer.

NO ES LA PRIMERA VEZ

No es la primera vez que Messi cuestiona de manera implacable las decisiones de la directiva. Ya en su momento, fue tajante a la hora de responderle a Eric Abidal cuando puso en duda el profesionalismo de la plantilla. El argentino no encontró respaldo desde la presidencia. El silencio de Bartomeu, sin embargo, lo hundió en una crisis directiva de la cual no ha podido salir. La entidad blaugrana no para en escándalos, como el que salió a la luz hace apenas unas semanas, cuando un informe reveló una macabra campaña en redes sociales por parte del mismo club para desprestigiar a la plantilla. Pese a sus intentos, el presidente no fue capaz de explicar los sucedido. La respuesta de la afición fue instantánea, lanzando una sonora pitada desde la grada del Camp Nou para pedir su dimisión.

PODER DE CONVENCIMIENTO

Entre otras cosas, Josep María Bartomeu ha sido cuestionado por su falta de capacidad al momento de negociar. Desde su llegada al conjunto azulgrana, en el 2014, la única decisión acertada que tomó de llevar al banquillo a Luis Enrique. Bartomeu apeló a la fórmula exitosa de Joan Laporta con Frank Rijkaard y Pep Guardiola y buscó formar un equipo ganador mediante el ADN. La apuesta le salió en un principio, sin embargo, tras la salida del técnico asturiano no encontró más el rumbo. Recientemente, la decisión de llevar en sustitución de Ernesto a Quique Setién por encima de Xavi le salió cara. La mirada escrutadora del socio culé descubrió con tristeza la falta, una vez más, de un proyecto a futuro.

FALTA DE RESULTADOS

La gestión de Josep María Bartomeu al frente del Barcelona será recordada por la incapacidad de aprovechar al mejor jugador en la historia del club. Cuando uno ve jugar a Messi irremediablemente se pregunta cómo es posible que en los últimos seis años tan sólo ganó una Champions League. El conjunto culé tiene dominada la Liga Española, al ganar cuatro de las últimas seis ediciones, sin embargo, la sequía en Europa, las eliminaciones estrepitosas ante la Roma y el Liverpool y las decisiones tardías para buscar soluciones han sido la gran tarea pendiente de su mandato. Bartomeu y su directiva no han podido conformar una plantilla ganadora. La cantidad de fichajes errados como Coutinho y Dembelé ponen en evidencia un proyecto que no encuentra la clave. La directiva azulgrana descubrió muy tarde que con Messi no basta para dominar el mundo.

RECIBE EN TU CORREO LAS MEJORES NOTICIAS DEPORTIVAS, SUSCRÍBETE AQUÍ

Para ver como deshabilitar las notificaciones, da clic aquí