Por Jonathan Castillo

Los que nacimos antes de los noventa tuvimos la fortuna de ser deleitados por un futbolista que se desempeñaba como defensa, dominaba las praderas laterales como gacela y tenía un golpeo más violento y eficaz que el del astro portugués Cristiano Ronaldo. Así es, se trata de Roberto Carlos da Silva, histórico lateral izquierdo de Brasil que conquistó el Mundial de Corea-Japón 2002 con la ‘Verdeamarela’.

Roberto Carlos nació un 10 de abril de 1973 en Garça, São Paulo, a pesar de no ser un futbolista muy alto (1.68 mts), el paulista mostraba gran técnica, velocidad y potencia desde sus inicios. Su sueño de ser profesional comenzó en 1986. Debutó en el União São João Esporte Clube en 1989 a la edad de 16 años, el defensor sólo estuvo poco tiempo con el ‘verdão’, pues emigró a  las filas del Palmeiras en 1993.

Con el ‘Campeoníssimo’ conquistó un par de torneos Paulistas (1993 y 1994), el Campeonato Nacional de Brasil (1993) y el Torneo Río-São Paulo (1993). A pesar de su corta edad, el brasileño ya deslumbraba por su potencia en el balompié mundial, es por ello que el Inter de Milán se fijó en él para sumarlo a la temporada 1995-1996, sin embargo, su paso fue fugaz con los ‘neroazzurro’ debido a un problema interno que tenía con el estratega Roy Hodgson. Con el Inter sólo disputó 30 partidos y anotó cinco tantos.

En 1996, el técnico Fabio Capello mandó a pedir al defensor sudamericano para unirlo a las filas del Real Madrid. La operación fue relámpago puesto que el italiano relató para la cadena Fox que sólo bastó hablar con el presidente del cuadro ‘merengue’, en ese entonces Lorenzo Sanz, y un fax al club italiano: “No podía creerlo. Mandé un fax, hablé con el presidente y al día siguiente la operación estaba cerrada. Pudo ser la más rápida de siempre”.

Vestido de blanco fue como explotó Roberto Carlos, ya que la mayor parte de su carrera como profesional la jugó con el Real Madrid. Sus mayores logros a nivel de clubes fue con el conjunto español, al que permaneció once temporadas y conquistó cuatro Campeonatos de Liga (1996-1997, 2000-2001, 2002-2003 y 2006-2007), tres Ligas de Campeones (1998, 2000, 2002), dos Copas Intercontinentales (1998, 2002), una Supercopa de Europa (2002) y tres Supercopa de España (1996-1997, 2000-2001 y 2002-2003).

En marzo de 2007, Roberto anunció que al final de la campaña 2006/2007 dejaría de jugar para los ‘merengues’. Para junio de ese mismo año fichó por 3 temporadas con el Fenerbahce de Estambul, de esta forma, emigró al futbol turco. Al final, no pasó mucho con el lateral izquierdo, pues sólo logró 6 anotaciones en las temporadas que estuvo con el conjunto europeo.

Para finales del 2009, Roberto decidió regresar a su país y firmó con el Corinthians en 2010, pero su pasó fue precoz con el ‘Timao’ debido a las supuestas amenazas que recibió tras perder la Copa Libertadores de esa temporada. El 12 de febrero de 2011 firmó un contrato por 10 millones para jugar dos temporadas con el FC Anzhi Majachkalá, en Rusia.

Con la selección brasileña alcanzó la gloria en el mundial Corea-Japón 2002, en donde venció al cuadro teutón en la final con un 0-2 en tiempo regular, con doblete de Ronaldo Nazário. Además, años antes logró conquistar con la ‘Verdeamarela’ una Copa Confederaciones en 1997 y las Copas América de 1997 y 1999.

Cabe destacar que a pesar de desempeñarse como defensa lateral, Roberto Carlos da Silva registró una suma de 123 goles a nivel de clubes, entre ellos sobresalen las 69 anotaciones que realizó con los Merengues, entre Liga, Copa y competencias internacionales. Además se le recuerda por ese golazo que le hizo a la escuadra gala un año antes del Mundial Francia 1998, en la final de la Copa Confederaciones.

RECIBE EN TU CORREO LAS MEJORES NOTICIAS DEPORTIVAS, SUSCRÍBETE AQUÍ