POR ABIGAIL PARRA

LA urgencia de una victoria enfrenta a Guillermo Vázquez con su eterno verdugo. Jamás como futbolista de Pumas ni como técnico le ha ganado al Rebaño Sagrado en la Perla de Occidente. El próximo domingo, en el estadio Omnilife, Memo tendrá la ocasión histórica de lograrlo.
“Ellos (las Chivas) tienen un muy buen equipo”, dice el director técnico de Pumas. “Los dos (equipos) necesitamos los tres puntos y trabajaremos para salir a ganar”, advierte sin añadir más.
El hecho es que en todos sus años como futbolista, sólo en tres ocasiones enfrentó a las Chivas, en el Jalisco, con la casaca puma. En 1987-88 igualó 0-0, en 1988-89 registró 1-1 y en 1989-90 perdió 2-1 en el mismo escenario.
Mas en sus posteriores años como jugador de Tecos, Monterrey, Toros Neza y Pachuca, sólo en una ocasión pudo romper su propia maldición. Se trata de la temporada 1992-93, cuando jugaba para Tecos. En ese entonces los zapopanos se impusieron 0-1 en el Jalisco con gol de Osmar Donizete. Vázquez participó los 90 minutos.
A esa historia de dominio que pesa sobre los Pumas frente al Guadalajara, en la Perla de Occidente, se añade la del técnico auriazul, quien en el Verano 1997 experimentó el pasaje más doloroso, cuando cayó en la final del certamen, 6-1 contra el Rebaño, enfundado entonces en los colores de Toros Neza. También jugó todo el partido. Curiosamente en aquellas Chivas el técnico era Ricardo Ferretti, a quien después sirvió como auxiliar en Pumas.
Para el “domador” felino el domingo será la cuarta oportunidad de dejar en el olvido el saldo, pues el actual timonel lo intentó en tres ocasiones, todas ellas con empates: Apertura 2010, Clausura 2011 y Apertura 2011. Para colmo, la única vez que como técnico de Cruz Azul visitó al Guadalajara, tampoco se impuso. Empate 1-1 en el Clausura 2013.

SERÍAN 33 AÑOS
Tres largas décadas han transcurrido desde la última vez que el equipo auriazul rasguñó a las Chivas en su propia casa. Si el próximo domingo no lo logran serán 33 años cerrados.
Las generaciones han crecido y pocos recuerdan el 7 de febrero de 1982 (torneo 1981-82) en el que los auriazules, comandados por Bora Milutinovic, llegaron en la fecha 22 para doblegar 1-0 a los locales con la solitaria anotación de Manuel Negrete en la agonía del duelo. En total, 32 enfrentamientos en campeonatos regulares: 20 empates y 12 triunfos rojiblancos (sin contar los años 1985 y 1986 en el futbol mexicano). Han sido también tres Liguillas, con una sola victoria de los jaliscienses.
Esta es la racha que Guillermo Vázquez intentará romper junto a su manada el próximo domingo en el Omnilife. De hacerlo sería en el momento menos oportuno para el chiverío. Curiosamente en su año de supervivencia.