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Gisleno Medina, quien fuera uno de los grandes jugadores en la historia de Atlante, falleció en Cuernavaca, Morelos, a la edad de 78 años.

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El ex jugador uruguayo, quien es considerado como una de las leyendas de los Potros de Hierro, había estado en la lucha contra un cáncer cerebral incapacitante, además de que su estado empeoró al sufrir una infección en vías urinarias que derivó en una insuficiencia renal.
El charrúa jugó con los azulgranas durante la época de los 70’s, pero tuvo que decirle adiós a las canchas de manera prematura debido a que descubrieron que contaba únicamente con un riñón.
Dentro del mundo del futbol, Gisleno también fue director técnico y promotor. En 1975 se recibió como entrenador por parte de la Federación Mexicana de Futbol para posteriormente fundar y dirigir al Deportivo Morelos, equipo al que convirtió en subcampeón de la Segunda División.

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Fue en junio del 2016 cuando le detectaron el cáncer cerebral y de a poco sus condiciones de salud se vieron mermadas hasta que finalmente terminó por perder la vida acompañado por su esposa e hijas.