Con la tecnología de Google Traductor

Mira

1, mayo 2020 - 8:04

┃ Héctor Reyes

37db49ec-4cdd-4e21-b26c-5d0cca961071

Foto: Facebook Elsa Ávila

Elsa Ávila, primera mexicana en conquistar el Everest, por segundo año consecutivo canceló su regreso al llamado “Techo del Mundo”, la primera vez por falta de recursos y ahora por la pandemia del COVID-19, la cual ha sorteado gracias al budismo, un acercamiento interior y compartirlo, en lo que llamó el viaje de la vida.

RECIBE EN TU CORREO LAS MEJORES NOTICIAS DEPORTIVAS, SUSCRÍBETE AQUÍ

“Tan solo estar con ellos (monjes budistas) te inyectan una paz que fue lo que me invitó regresando a meterme en este mundo y la verdad tienen herramientas muy poderosas que nos puedan ayudar en situaciones como la que estamos viviendo actualmente del COVID-19”, expresó Elsa, quien inició su carrera a los 15 años. En estos tiempos de crisis, añadió que el budismo ayuda a estar más centrados en uno mismo, lejos de lo que llamó “basura mental”.

 

“Darnos cuenta de este equilibrio que estamos matando con acciones y pueden ser muy sencillas, a lo mejor la mayoría de la gente vivió un tanto inconsciente, pero veamos cómo la naturaleza por sí misma busca ese equilibrio sin que metamos mano nosotros”, apuntó la deportista que se ha sobrepuesto a serios problemas cardiovasculares, después de que casi pierde la vida en 1989, cuando se quedó a 98 metros de la cumbre del Everest.

 

10 años después regresó para conquistarla, en una anécdota que no había externado de cómo se dio su regreso para convertirse en la primera mexicana y tercera latinoamericana en escalar la montaña de 8,848 metros. Elsa ya era madre de Santiago y Karina y sufrió secuelas del congelamiento de las extremidades en el intento de llegar a la cumbre del Kanchenjunga, la tercera montaña más alta del mundo, en 1992 y donde falleció la alpinista polaca Wanda Rutkiewicz.

 

Para la expedición de 1999, a los 30 años de edad, comenzó por una invitación de amigos montañistas de México, Ecuador y Argentina, que a su vez habían sido convocados por Iván Loredo, lo que no sabía Elsa que era el esposo de Karla Wheelock.

 

“Le habló y elegantemente me dijo que no, yo no entendía por qué, hasta que me enteré de que estaban en la carrera para que Karla fuera la primera”, luego se dijo a sí misma: “qué raro que no me quieran invitar, pero bueno, yo tengo muchas ganas de ir, entonces busco por otro lado y como tenía muchos amigos no tuve problema para que me incluyeran en alguna expedición”, recordó la montañista que el 5 de mayo cumplirá 21 años de haber escalado el Everest.

Realiza cubrebocas con motivos taurinos

 

En enero, el polaco Krysztof Jerzy Wielecki, quinto hombre en coronar los 14 ochomiles junto con su pareja estuvo de visita en México. Elsa los llevó al Nevado de Toluca e Iztaccihuatl, el cual no llegaron a la cumbre debido a que desapareció el glaciar y lo que queda es hielo negro debido al cambio climático. El año pasado intentó conquistar la cumbre del K2, la última montaña de más de 8 mil metros que no se ha escalado en la temporada invernal.