POR IVONNE ALMARAZ

29 de abril del 2019, fecha que no olvida Diana Anguiano. Ese día la mediocampista de La Franja rompió en llanto luego de marcar un autogol en la vuelta de los cuartos de final del Clausura 2019 frente a Tigres, sin embargo, hoy lo recuerda como una de las lecciones más grandes en su carrera: “Es de los momentos que menos me gusta recordar, pero estos sucesos me han dejado muchos aprendizajes”, escribió la jugadora en el portal oficial del club.
“Me di cuenta que mi familia siempre está conmigo apoyándome a pesar de la distancia, al igual que mi equipo, todas hicieron algo para que no cayera y continuara esforzándome dentro del terreno de juego”, agregó.
Anguiano recordó el momento en que se decidió a perseguir su sueño para convertirse en futbolista profesional, mismo que en un principio le generó dudas: “Fue difícil porque estaba acostumbrada a estar en mi casa con mi familia, pero sabía que tenía que sacrificar algo, en este caso era el hogar; además de que tuve que dejar mis estudios y poner pausa para alcanzar la meta. Mi vida dio un giro de 180 grados, realicé visorias en diversos equipos donde por distintas circunstancias se me cerraron las puertas, pero insistir y no dejar de trabajar me abrió una tan grande en la que tenía que viajar a la ciudad de Puebla, donde se me dio esa oportunidad de cumplir mi sueño”, recordó.
Su capacidad y tenacidad en la cancha la tienen como una de las piezas fundamentales en el cuadro de Jorge Gómez, lo que no es coincidencia puesto que empezó a jugar desde los ocho años: “Cuando comencé tenía ocho y fue con mis familiares, todo por hobby, después ingresé a un equipo de niños en el que estaban mis primos, me acuerdo bien que los partidos eran canchas con tierra”, comentó.
“Posteriormente, mi papá y uno de mis tíos me querían meter a otro equipo junto con uno de mis primos, pero mi mamá no estaba de acuerdo porque a ella no le gustaba que jugara futbol, ya después al ver el gusto que me daba practicar este deporte, accedió y me llevaba a los partidos y así estuve jugando con niños hasta los 4 años”, relató.
Finalmente, confesó que extraña a sus compañeras, aunque recalcó que siguen entrenado desde casa para regresar de la mejor manera: “Por todo lo que está aconteciendo seguimos trabajando en nuestra casa, pero las extraño mucho, son quienes me ayudan a crecer dentro y fuera del campo de juego, además de estar en la cancha, entrenar y hacer todo lo que tanto me gusta”, remató.

Cristiano, listo para regresar a entrenar

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