Mientras que algunos diestros durante el confinamiento en el país, a consecuencia del Covid-19, se han dedicado a disfrutar de la vida en familia, otros, a practicar y mejorar su técnica del toreo o a afinar a sus caballos –en el caso de los rejoneadores- ,hay toreros que durante estos meses han concentrado su esfuerzo en cimentar un negocio. Es el caso de los hidrocálidos Arturo Macías, Luis David y Alejandro Adame. El primero con el lanzamiento de un aceite de oliva que produce en su finca de Aguascalientes; Luis David con la elaboración de pan de dulce, en el negocio que hace seis décadas fundó su abuelo en tierra aquicalidense y su hermano, el novillero Alejandro Adame, quien fundó una granja para producir huevos orgánicos de gallina. Ellos son la muestra de la resiliencia que han tenido los diestros en estos meses.

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Cuando Arturo Macías viajó a España hace once años al lado de su maestro Antonio Corbacho (q.e.p.d) para realizar una campaña en los ruedos, asentó su residencia por segunda ocasión en su vida en la localidad andaluza Castillo de las Guardas, sitio donde años antes, como novillero, también se estableció en lo que era su cuartel general. Entonces fue cuando se interesó en la producción de aceite de oliva de alta calidad que se genera en el territorio español y empezó a trabajar en el sueño de fundar su propia marca de ese producto.

Años más tarde, adquirió su rancho en nuestro país. Se llama Cuatro Caminos y está ubicado en el municipio de Pabellón de Arteaga, en Aguascalientes: “Lo compré después de mano a mano que toreé con José Tomás, en la Plaza México. Sembré cuatro mil olivos”, dijo el torero, vía telefónica para ESTO. Poco a poco se fue involucrando en la elaboración artesanal del aceite.

“Mi primera cosecha fue unos siete años después. A finales de 2019, importé desde la ciudad española de Castellón, España, un contenedor y maquinaria que me proporciona una diferencia de sabor para hacer el aceite como lo hacían los romanos, pero con la tecnología moderna”, agregó. Por ahora, es el único productor de la región que cuenta con esa maquinaria, por lo que tiene un plus de cara a las ventas. Debido a las restricciones por el Covid-19 no ha podido realizar un lanzamiento para medios, pero partir de ahora, ya cuenta con una producción de ocho mil botellas la disposición del consumidor.

Por su parte, Luis David Adame, quien para la temporada 2020 en Europa era el único matador mexicano para hacer una campaña completa, ante la imposibilidad de torear en estos meses, ha ido directamente a las raíces de su familia e incluso en instancias digitales ha compartido fotografías y un video, donde con orgullo muestra cómo se elaboran diversos tipos de panes. Se trata de las recetas que le enseñó su abuelo paterno, fundador, hace 60 años de la panadería Adame, la cual se ubica en la colonia Altavista, de la capital hidrocálida.

De este modo, las manos que acarician con temple las embestidas de los toros por las plazas de mundo, también demostraron que saben manejar la masa para generar deliciosos panes de repostería como cuernitos, donas y conchas. El oficio que aprendió de su abuelo, lo aprendió a la perfección y con variedad. Y su hermano menor, el novillero Alejandro Adame, ha creado una granja para producir huevos orgánicos. Distribuyen sus productos entre los pequeños comerciantes de la región, a la espera de que se puedan volver a realizar festejos en las plazas de toros, estos coletas han incrementado su preparación física y lidiado astados a puerta cerrada, en las dehesas de la geografía de Aguascalientes.

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