POR GUILLERMO MARTÍNEZ GONZÁLEZ

Como una pirámide derrumbada quedó el trabajo que hizo el entrenador Juan Hernández con la marchista Guadalupe González, así lo señaló el estratega que la convirtió en subcampeona olímpica.

“Estoy triste por ella. Pero después de los Juegos Olímpicos de Río 2016, la pirámide que habíamos construido se derrumbó. La asesoraron mal y ahí están las consecuencias. Ojalá se recupere ella, aunque ya llegará grande de edad a París 2024”.

RECIBE EN TU CORREO LAS MEJORES NOTICIAS DEPORTIVAS, SUSCRÍBETE AQUÍ

El entrenador se dijo con sentimientos encontrados por la suspensión que tuvo de cuatro años por dopaje, y que no está enterado de quién es el abogado que hizo las cosas mal con Lupita.

“Desde los Juegos Olímpicos de Brasil, platiqué muy poco con Lupita, por eso ahorita no sé nada de eso. Lo poco que sé, es que ella tenía un abogado colombiana, pero ahorita me entero que es mexicano. Así que no sé cómo llevaron el problema de ella con eso”.

Platicó que siempre tuvo una amistad de respeto entre ambos, y la impulsó a superar los retos.

“A ella la estimaba mucho como atleta y persona. Nos dedicamos a trabajar, así que no tuve problemas en ese sentido. Tuvimos problemas de otro tipo, con su entrenador y el doctor que la atendía”.

Sobre el que haya Lupita recurrido a tomar alguna sustancia, el profesor argumentó:

Lupita González demanda a dos personas de la Conade

“Soy un poco indeciso sobre ese tema, porque su pareja o entrenador con quien está después de Río 2016, está acostumbrado a tener problemas. Yo nunca tuve problemas con ella, ni le dije que debía tomar algo para mejorar, lo mío fue trabajo. En México tenemos muchos lugares bonitos para trabajar”.

El entrenador dijo que Lupita sí puede llegar a los Juegos de París 2024.

“Si ella quiere, puede. Nuestra separación surgió porque ella no me apoyó con el equipo multidisciplinario. Por eso hice separarme para no tener problemas tampoco con su familia. Si buscaban la medalla para Tokio 2020, no tenían que haberse metido nada”.

Dijo que su plan era lograr una marca Mundial y después llegar a Tokio 2020.

“Pero ella prefirió primero llegar a Río 2016. Así que el culpable de todo lo que pasó después, es Esteban Solano. Ella sabía de todo lo que es el dopaje, pero si no se preocupó, es su problema, además del entrenador y del médico que hayan tenido”.