POR RUBÉN BERISTÁIN

Franco Arizala vivió días llenos de incertidumbre. El futbolista colombiano fue uno de los afectados tras la desaparición del Ascenso MX, ya que militaba hasta hace unos meses en los Alebrijes de Oaxaca, último campeón de la categoría de plata.

Con 34 años, el sudamericano quedó libre y pensó en volver a su país, pero el destino lo llevó a seguir su carrera en el futbol mexicano y ahora es uno de los refuerzos de renombre que jugará en el Club Veracruzano, que jugará en la Liga de Balompié Mexicano a partir del mes de octubre.

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“Hola a todos, estoy contento de ser nuevo tiburón, pronto estaré en el puerto listo para aportar mi futbol”, expresó el delantero en un video difundido por la institución jarocha en sus redes oficiales, acompañado de varios momentos con sus mejores goles en México.
Fue en el 2010 cuando Arizala llegó a nuestro país con los Tuzos del Pachuca. Su largo recorrido incluye a equipos como Jaguares, León, Atlas, Puebla y Cafetaleros de Chiapas. Ahora se reencontrará con el uruguayo Gustavo Matosas, quien lo dirigió en 2014 y con quien logró el bicampeonato con La Fiera, pero que ahora funge como padre de la directiva del cuadro de Veracruz.

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