Foto: EFE

Los ojos del medio taurino estuvieron puestos en la corrida que se llevó a cabo en la plaza de Ávila, pues fue la primera en realizarse tras el confinamiento de cuatro meses que se estableció en España a consecuencia del Covid-19; y estos fueron testigos de la gran actuación que brindó el mexicano Ernesto Javier Calita, que si bien ante el segundo del encierro perdió la oreja por fallos con el descabello, ante el quinto mejoró la técnica al entrar a matar, con lo que cosechó un valioso apéndice.

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Este triunfo, para el torero nacido en el Estado de México, ha sido labrado a golpe de esfuerzo durante los meses que permaneció entrenando en tierra ibérica y este sábado en la plaza, que dada las nuevas disposiciones sanitarias registró la máxima capacidad permitida, ya que los aficionados respetaron el 1.5 metros de sana distancia entre cada uno.

Calita ha puesto en alto el nombre de México, tras una ausencia de casi nueve años en los ruedos del otro lado del Atlántico. Enfrentó con solvencia el lote que le correspondió, de la ganadería Vellosino. El segundo de la lidia fue armónico de hechuras, pero áspero en su juego, inclusive provocó un tumbo al picador y luego se tornó violento; y el quinto, el más fuerte y serio del encierro, fue de menos a más.

Ante estos, el coleta mexicano estuvo muy decidido. A su primero lo saludó con ajustados lances en los que inclusive se echó el capote a la espalda. Le plantó cara con seguridad, pero, debido a que debió usar el descabello tras la estocada, perdió el apéndice. Con el quinto, que no quiso emplearse ante la capa, sacó a flote la paciencia y lidió como el astado le pedía, hasta redondear una destacada faena, con muletazos de trazo largo, mayormente por el pitón izquierdo. Tras una estocada certera, misma que ejecutó a toro parado, recibió una valiosa oreja.

El primer espada del cartel, Finito de Córdoba obtuvo un balance de saludos y saludos tras aviso, López Simón fue el triunfador al cortar una oreja en cada toro, mientras que Calita se retiró del coso entre una cerrada ovación, luego de haber cosechado silencio tras aviso y oreja, ante segundo y quinto toros, respectivamente. Se lidiaron toros de El Vellosino, bien presentados, de juego manejable, destacó el sexto que fue estupendo. Cabe destacar que el paseíllo se llevó a cabo en silencio, en señal de luto por los miles de fallecidos que registra España a consecuencia del Covid-19, en señal de luto.

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