El 7 de agosto de 2010 con el exótico 44 en su espalda Jesús Sánchez se presentó en Primera División. Una década después, con ligeros cambios físicos, como si el tiempo no pasara por él, el Chapo sigue en el redil. Técnicos se van, llegan, jugadores también, pero Jesús y los árboles que rodean Verde Valle siguen en el mismo lugar. Diez años de hacer la misma rutina, pero si por él fuera, lo hace para siempre. Oveja fiel.

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El debut del Chapo sucedió en la fecha 3 del Apertura frente al extinguido San Luis, en ese tiempo conocido como Gladiadores, ninguna conexión con el actual Atlético más que el estadio Alfonso Lastras. José Luis Real le abrió un hueco en la alineación titular al joven de 20 años que llegó de Caborca. Jesús jugó e inició con el pie derecho su historia en el futbol mexicano. Chivas superó 1-0 a los tuneros con tanto de Marco Fabián.

De esa alineación solo sobrevive Jesús y Miguel Ponce, el Pocho también apareció en 2010, sigue en Chivas, sin embargo el lateral izquierdo no es puro, Miguel ha estado en Toluca y Necaxa, mientras que Sánchez todo el tiempo ha sido rojiblanco.

El resto de ese plantel con el que el Chapo debutó o se retiró o está en otro lado. Luis Michel, Jonny Magallón, Christian Pérez, Mario de Luna, Dionicio Escalante, Patricio Araujo, Marco Fabián, Mitchel Oviedo, Adolfo Bautista y Michel Vázquez cobijaron a su lateral derecho de inicio, mientras que Édgar Mejía, Ponce y Ulises Dávila ingresaron de cambio.

“Estoy muy contento y feliz de tener tanto tiempo en Chivas. Todo lo que me ha pasado me ha ayudado a crecer, no quitaría nada de lo vivido. Trato de ponerle la mejor cara a lo que viene, si son momentos de alegría los disfruto, pero sin son momentos difíciles apechugo y pedaleo”, dijo Jesús hace poco a las redes sociales rojiblancas.

El Chapo vivió la época de vacas flacas, pero también fue parte fundamental en los éxitos de chiverío a partir de 2015.

Jesús junto a Matías Almeyda y esa generación ganadora, levantó la Copa MX en 2015 y luego todo en 2017, Liga, Copa y Liga de Campeones de Concacaf. Un año antes en 2016 cosechó la Supercopa MX. Las vitrinas rojiblancas y personales se le abrieron.

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Los galardones son muchos, pero “espero que sean más, quiero tener más logros con esta playera”, mencionó Jesús en la misma plática.

Si el Chapo pudiera, firma contrato de por vida con el Rebaño: “Tengo la ilusión de vestir solo esta playera, me voy a preparar lograr ese sueño que tengo y si Dios lo permite, que la playera de Chivas sea la única que vista, es una institución que representa mucho para mí”, destacó Jesús.

El día histórico le tocó en mal momento a Sánchez. El Chapo fue operado del ojo izquierdo la semana pasada tras el golpe que recibió en la jornada 1 frente a Tijuana. Jesús sigue recuperándose, su participación en el juego del sábado frente a Puebla está casi descartada.