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Mira

4, septiembre 2023 - 10:50

┃ Karen Morán

Gustavo Cerati era fiel aficionado del Racing de Avellaneda / Foto: IG Gustavo Cerati

Gustavo Adrián Cerati no fue un tipo común y corriente. Inevitable a su naturaleza argentina era hincha de un club, del Racing de Avellaneda, pero lo fue en pequeñas dosis, a penas mostrando su simpatía.

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A diferencia de algunos de sus compatriotas, el nacido un 11 de agosto de 1969 en Barracas, Buenos Aires. No subía al escenario envuelto en el jersey de su equipo, tampoco compuso canciones al balón o pasó por la vida profesando su amor a ‘La Academia’. Simplemente cuando fue cuestionado sobre futbol, un discreto “de Racing, pero poco futbolero”, aclaró el misterio.

De los pocas anécdotas que se tienen registro está lo sucedido en un concierto en 1997 en La Plata. Cuando en plena interpretación de ‘Primavera cero’ desprende de su voz un “Dale Racing” sin más aspavientos. Fuera de aquel día la hipnotizante voz del vocal de Soda Stereo fue siempre la protagonista, y aunque no era un obsesionado de la pelota. Su música evocó la misma o más emociones que las que provoca un grito de gol. En el mismo lugar donde la gente se reúne para verlo, en los estadios.

En compañía de Zeta Bosio y Charly Alberti cambió la historia del rock latinoamericano. Juntos conquistaron cientos de escenarios y millones de personas. En sus giras pasaron por todo tipo de condiciones, pero sus presentaciones más épicas fueron en estadios de futbol. El Chateau Carreras de Córdoba, el José Amalfitani del Vélez Sarsfiel y el Monumental en Santiago de Chile fueron algunos de los recintos que dejaron recuerdos espectaculares. Pero sin duda lo que se vivió en el 20 de septiembre de 1997 en el Monumental de River, es inigualable.

La gira del adiós comenzó en la Ciudad de México, pasó por Monterrey, Caracas, Santiago de Chile y finalmente llegó a casa, Buenos Aires. Lugar donde en teoría, la voz de Gustavo Cerati en Soda se apagaría por siempre y aunque no sucedió así. Pues más tarde regresaron con la gira ‘Me veras volver’, la fecha final en el Antonio Vespucio. Mejor conocido como el Monumental, reunió a 60 mil personas.

Cerati apareció en el escenario y tras exclamar “Llegó la hora, el minuto, el segundo, el instante. Supongo tienen sed. Soda Stereo, Buenos Aires, Argentina”, 27 canciones recorrieron la trayectoria de La banda hasta culminar con ‘De Música Ligera’, para el final de la canción el compositor argentino exclamó una de las frases que ha trascendido dimensiones y que millones de personas en el mundo trasladaron a su realidad para convertirla en suya: “No solo no hubiéramos sido nada sin ustedes, sino con toda la gente que estuvo a nuestro alrededor desde el comienzo; algunos siguen hasta hoy. ¡Gracias totales!“.

Después del emotivo adiós vino la inevitable vuelta, en la que los estadios estuvieron nuevamente presentes, de las 23 fechas ocho fueron en recintos futboleros: El Monumental(Argentina), Nacional (Chile), Alberto Spencer (Ecuador), Universitario y 3 de Marzo (México), Nacional (Panamá), Nacional (Perú) y el Chateu Carreras en Córdoba. 

En solitario sus conciertos fueron más modestos, pero con el paso del tiempo comenzó también a llenar estadios. El último recinto en el que se le escuchó fue en San Marcos, en Perú, poco antes del incidente cardiovasular que con el paso del tiempo acabó con su vida.

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